Las retenciones y largas colas de vehículos en la carretera nacional 352, que enlaza el centro de la ciudad con la frontera del Tarajal, están causando pérdidas diarias a la empresa de autobuses Hadú Almadraba de unos 2.000 euros, según ha explicado a su paso por el programa La Mañana de COPE Ceuta su gerente, José María Cuéllar, que se ha mostrado preocupado por el hecho de que esta situación se prolongue en el tiempo “y no podamos cumplir horarios ni rutas”. No es el único sector que ya ha comunicado pérdidas a consecuencia de las colas. Por ejemplo, el del taxi las estima en un 30%.
“Lo que estamos sufriendo con el transporte por el caos circulatorio en la frontera no está escrito”, añadió Cuéllar. “Hemos buscado rutas alternativas, pero en esta situación nunca vamos a dar el servicio a los usuarios que queremos dar”, se lamentó el director de la empresa de autobuses que subrayó que, de momento, se ha decidido no eliminar “ninguna línea”, a pesar “de que estamos teniendo problemas diarios con los usuarios” y que lo que se está propiciando son rutas alternativas para evitar en lo posible “que los coches se queden en los atascos y no puedan salir, como nos ha pasado esta semana, cuando un conductor no pudo ser relevado hasta dos horas después tras estar metido en una cola”.
José María Cuéllar, por otra parte, ha cifrado en unos 6.000 euros el gasto en las ocho lunas que han sido destrozadas a causa de actos vandálicos en el mes de enero. “Son un cúmulo de problemas que nos hacen tirar la toalla, porque estamos agonizando”, la lamentado en alusión además al conflicto laboral que hay suscitado en la empresa a raíz de que se haya puesto encima de la mesa un expediente de regulación de empleo, con cinco despidos, o una reducción salarial a la plantilla debido a las pérdidas de los dos últimos años. Cuéllar recuerda que para dar viabilidad a la empresa es necesario una subida de cinco céntimos en la tarifa ordinaria y en la de bonobús. “Es una subida pequeñísima lo que pretendemos, eso unido a que la Ciudad se haga cargo de la bonificación al transporte de estudiantes y trabajadores, que nos supone 200.000 euros al año, daría un respiro a la empresa, porque la mitad de esa tarifa la estamos asumiendo nosotros sin motivo”.