Desde que comenzó a aplicarse la nueva normativa en mayo de 2012, pasaron de 497 a 1.236 trabajadoras en el mismo mes de 2013.
Zohra trabaja para los Alcántara, una familia residente en la ciudad. En estos días renuevan su contrato de trabajo porque este hogar ceutí se manifiesta muy satisfecho con el trabajo que ella realiza en casa. Esta marroquí es una de las trabajadoras transfronterizas dada de alta en la Seguridad Social tras la entrada en vigor de la normativa que regula el empleo doméstico en Ceuta, la disposición adicional trigésima novena de la Ley sobre actualización, adecuación y modernización del sistema de Seguridad Social (Ley 27/2011).
El Área de Trabajo de la Delegación del Gobierno comunicó que en mayo de 2012, el número de trabajadores en este sistema especial para los transfronterizos ascendió a 497, mientras que en mayo de 2013 se situó en 1.236, es decir, su cifra casi se triplicó en el último año.
En cuanto a la cantidad de empleadores, es decir, aquellas personas que contratan el servicio de las marroquíes, fue de 487 frente a 1.228 doce meses más tarde. La cifra de trabajadores es sensiblemente superior al de contratantes porque un mismo patrón puede tener a una o dos transfronterizas empleadas o bien que una cause baja y la misma familia fiche a otra mujer.
Según la tesis doctoral de la Facultad de Educación y Humanidades de la Universidad de Granada (UGR) titulada Mujeres transfronterizas: marroquíes empleadas del hogar en Ceuta, cuya autora es Nuria Galán, “la mayoría de las marroquíes cruzan a diario la frontera entre Ceuta y Marruecos para trabajar como empleadas del hogar realizando tareas domésticas y/o de cuidados”.
“Este grupo está formado por unas 4.000 mujeres, si bien no existen cifras oficiales que lo confirmen. La Ciudad Autónoma reconoce en un estudio realizado por el Centro Asesor de la Mujer la dificultad de calcular la cifra exacta que compone este colectivo”, continúa el mismo estudio a propósito de esta economía sumergida.
En cuanto al número de renovaciones al cumplirse un año de esta medida, durante 2012 se concedieron 618 autorizaciones iniciales y 658 renovaciones de permisos de trabajo transfronterizo. En cuanto a los datos de este año, de enero a junio se registró un total de 476 renovaciones.
El incremento en la contratación laboral registrado por el Área de Trabajo arrancó el 1 de mayo, fecha en la que comenzó a ejecutarse el criterio de autorizar los permisos de trabajo de las empleadas del hogar de las 20 a las 40 horas semanales. Con anterioridad, sólo se permitía la contratación a tiempo completo.
“El primer año de aplicación de la normativa que regula el empleo doméstico en Ceuta ha sido muy favorable, pero no por la aplicación de esta normativa, sino debido al cambio de la interpretación que de la normativa de Extranjería se ha llevado a cabo por el actual delegado del Gobierno”, explicó Remedios Muñoz, directora de esta materia en la representación de la Administración central en la ciudad autónoma.
A partir del 1 de mayo de 2012, los ceutíes pudieron contratar a estas trabajadoras aunque haya demandantes de empleo inscritas en las listas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), “si no se ajustan a las características que soliciten”, indicó la Delegación, que subrayó a través de una nota de prensa publicada por este periódico que, precisamente las condiciones “particulares” en las que se realiza esta la actividad laboral justifican “una tramitación específica y diferenciada”.
La primera de estas condiciones es el ámbito en el que se desarrolla el trabajo, que es el ámbito doméstico, “el hogar familiar, tan vinculado a la intimidad personal y familiar y por completo ajeno y extraño al común denominador de las relaciones laborales”, indicó la Delegación y en segundo lugar, el vínculo “personal” basado en una especial relación “de confianza que preside, desde su nacimiento la relación laboral entre el titular del hogar familiar y los trabajadores del hogar”, algo que “no tiene que estar forzosamente presente en los restantes tipos de relaciones de trabajo”.
Desmiente que carezcan de atención sanitaria
El eurodiputado de Izquierda Unida, Willy Meyer, denunció las condiciones laborales “discriminatorias” que sufren los trabajadores transfronterizos en una pregunta parlamentaria. El Área de Trabajo de la Delegación del Gobierno aseguró que las transfronterizas cuentan con asistencia sanitaria al igual que el resto de trabajadores, uno de los puntos que IU criticaba. En cuanto a la cotización por desempleo, Trabajo explicó que los transfronterizos tienen derecho a acceder a las prestaciones de la Seguridad Social en igualdad con los españoles pero, para cobrar la prestación y en su caso el subsidio por desempleo al igual que los españoles, han de residir en España.