Los presupuestos del año 2012 se han saldado con una liquidación positiva de algo más de veintiséis millones de euros, de los cuales una vez descontados determinados aspectos técnicos, el remanente que ha quedado en la Tesorería de la Ciudad Autónoma ha sido de algo más de trece millones de euros. De ello, unos siete millones doscientos mil euros se destinarán al abono de deudas que quedaron pendiente del ejercicio anterior. Son esos siete millones de euros por los que ha preguntado la oposición en alguna ocasión y que incluso el mismo portavoz y consejero de Economía y Hacienda, Guillermo Martínez, ha explicado en alguna ocasión.
Son determinados pagos a Urbaser y a otras empresas, pero no porque se hayan acumulado después de que la Ciudad se sometiera a las condiciones del plan de pago a proveedores, sino porque con las cantidades que estaban presupuestadas de 2012 se abonaron a estas empresas débitos de ejercicios anteriores, con lo cual una parte de lo realizado en 2012 quedaron pendientes y que ahora se atenderán con el remanente que ha quedado de la liquidación presupuestaria.
En otro orden de cosas, pero también relacionado con el Consejo de Gobierno se le preguntó al portavoz si se había abordado en el mismo el tema de como se va a enfocar la petición del acuerdo plenario en relación a que sean rotativos los deslatres que deben hacer las empresas de energía eléctrica y que no sean siempre las mismas líneas la que se quedan sin luz cada vez que hay una caída de la tensión eléctrica.
Sobre este particular indicó que no se había abordado, pero que la Consejería de Fomento se habrá puesto a trabajar para dar cumplimiento al acuerdo adoptado por todos los grupos políticos.