La gestión económica de la Administración local mejoró ostensiblemente en 2012 en su desenvolvimiento ordinario a la hora de efectuar los pagos y obtener los ingresos sobre los que genera derechos reconocidos con respecto a 2011. Así lo demuestran los datos de ejecución presupuestaria, provisionales, que sobre el año pasado publicó ayer la Ciudad Autónoma. Según las cifras de esta documentación oficial, el Gobierno local terminó el ejercicio pasado con unos ingresos netos de 255,7 millones de euros (bastante más que en 2011, cuando fueron 170,2 millones, aunque el Plan de Pago a Proveedores distorsiona los números absolutos).
Menos distorsionado es el análisis de los datos en términos relativos. Mientras que en 2011 se generaron un total de 253,2 millones de euros en derechos de ingresos reconocidos hasta la finalización del cuarto trimestre del año y engrosaron de forma efectiva las arcas municipales un 70%, este porcentaje aumentó en 25 puntos en 2012.
Durante el año pasado, la Ciudad Autónoma fue capaz de cobrar casi todo a lo que se hizo definitivamente acreedora: un 95% de 266,9 millones.
En términos de gasto, la evolución a mejor se cifra en quince puntos porcentuales. Si en 2011 se llegó al 31 de diciembre con 196,3 millones de euros en pagos efectivamente realizados y 32,1 pendientes, el ejercicio pasado se alcanzó la misma fecha con 265,7 efectuados y solamente 6,3 sin materializar.
Un paso administrativo más atrás, en el apartado de obligaciones reconocidas, el año pasado se cerró con 275,9 y 3,9 pendientes. El análisis del mismo indicador en 2011 rebaja el primer número hasta 240,8 y eleva el segundo hasta 12,4.
El Gobierno que preside Juan Vivas comenzó a publicar hace ocho trimestres por primera vez y de forma voluntaria, coincidiendo con la obligación que se impuso a las Comunidades Autónomas, sus balances trimestrales de ejecución presupuestaria.