Anuncia además que apostarán por la duración de cinco días de ahora en adelante en los festejos y que la asistencia de musulmanes ha sido mayor que otros años
Los datos estiman que una media de 20.000 personas han pisado el Real durante la Feria de Ceuta, unas fiestas que desde la Ciudad han propuesto reducir de ahora en adelante a cinco días dado el “rotundo éxito” que aseguran ha supuesta esta última edición.
Fue el subdirector general de Festejos, Salvador Jaramillo, el que dió las cifras durante una comparecencia al lado del consejero de Juventud, Turismo y Festejos, Premi Chandiramani. Ambnos manifestaron la satisfacción por un trabajo bien hecho y bien coordinado desde todos los frentes: tanto los feriantes, como los responsables de la seguridad, los encargados de la limpieza, la ciudadanía, etc. Festejos, en contacto constante con el área responsable de limpieza, manifestó que será en ocho días cuando la explanada de La Marina recupere su imagen habitual, comenzando a desmontar las casetas el mismo lunes una vez concluida y dada por finalizada la fiesta en el Real.
Los pasos a seguir en la actualidad son los de llevar a cabo una reunión con la Asociación de Feriantes en la segunda quincena de enero donde se intentará ir cerrando el programa festivo de cara al próximo año estableciendo citas la Ciudad de manera correlativa con todos los sujetos implicados en la organización. “El objetivo es tener en mayo el calendario cerrado con los detalles”, apuntó Chandiramani.
Hubo agradecimientos al delegado de Gobierno también “por su ayuda y cooperación” y el propio Jaramillo destacó un dato importante: el incremento de asistencia de musulmanes, al “coincidir la feria con un mes de Ramadán ya más avanzado destacando el buen clima y convivencia que se ha podido disfrutar, ya que “las intervenciones no han sido de importancia, habiendo varias ocasionados por pequeños hurtos y a nivel sanitario por rozaduras, algún esguince, alergias y poco más”.
Ahora los trabajos para recuperar la normalidad avanzan “a buen ritmo” destacando el trabajo de 58 operarios de limpieza por la mañana, 58 por la tarde y 28 en turno de noche durante unos días que han llenado la Marina de diversión. “Hubo picos en los que se calcula haber llegado a las 25.000 personas. Hay que tener en cuenta que si cada caseta tiene capacidad para 150 personas y había 46, ya sólo contando las casetas se superaban las 7.000 personas asistentes”, apuntaba Jaramillo, que también recibió las felicitaciones del consejero durante la rueda de prensa de fin de feria.
Cinco días es suficiente
Cinco días de Feria es un tiempo más que razonable para el disfrute de las fiestas patronales. Así lo ha estimado la Ciudad, que se pondrá a trabajar de cara a que en las próximas ediciones se instaure este tiempo dejando de lado los nueve días que años anteriores sumergían a la ciudadaníá en sus fiestas patronales. Otra de las novedades que al parecer ha gustado a todos, es la ubicación de los hippies lejos del Paseo de la Marina, algo que se plantea hacer de cara a Navidades, así como el acondicionamiento del cuartel para dejar allí las caravanas y camiones de los feriantes “quedando un espacio más amplio para que la ciudadanía pudiera disfrutar en la zona de los cacharritos”.