Aunque la Policía Nacional sigue investigando el origen del incendio que arrasó por completo el restaurante ‘Las Cabañas’ del complejo rural Miguel de Luque, todo apunta, por las conclusiones preliminares, que no fue provocado y que, por tanto, su origen fue accidental. Además las llamas partieron del interior del restaurante, no desde fuera, terminando por arrasar todo el inmueble sin que los agentes del SEIS pudieran hacer algo por controlarlo.
Los responsables del local esperan ahora ese informe definitivo para poder empezar de nuevo y para que se aclare cuál fue la causa exacta que provocó el siniestro. Un siniestro en el que la labor de los agentes del Cuerpo de Bomberos fue clave, ya que gracias a su eficaz intervención evitaron que las llamas fueran a más y terminaran dañando el complejo rural en el que viven decenas de personas.
Más de tres horas les costó controlar las llamas, en una noche de fuerte viento de Poniente, en la que la familia del desaparecido Miguel de Luque lo pasó francamente mal temiendo por la desaparición de su negocio: el único complejo rural que existe en la ciudad. La Policía Científica del Cuerpo Nacional se ha encargado de la investigación pertinente.