En la calle Narváez Alonso, número 2, los vecinos no dejan de pedir un punto de luz. “Es imposible, llevamos así mucho tiempo y parece que les cuesta la misma vida poner una bombilla, mientras que en el centro se rompe una bombilla y cambian la farola entera”, lamentan. Esperan que tomen de una vez en serio la petición “porque los vecinos por la noche estamos a tientas”.