La pasada madrugada volvió a servir a los autores de quemas de vehículos para volver a las andadas. Y lo hicieron de forma especialmente dura, calcinando dos coches y dañando otros dos más que estaban estacionados cerca. La primera de las intervenciones tuvo lugar en un callejón de la calle Fernández Amador. Allí se produjo, pasadas las tres de la madrugada, la quema de un coche sin matrículas, cuyas llamas afectaron a otro. Pero más sangrante fue la provocada en el Hospital Militar tan sólo una hora después. Allí quedó calcinado por completo un vehículo, que además era nuevo, y, las llamas alcanzaron a otros dos coches que estaban estacionados a su lado. Los Bomberos no tienen lugar a dudas: ambos incendios fueron provocados. Y no precisamente como parte de la picaresca para forzar a la retirada de coches abandonados. Muy al contrario, se trataba de coches nuevos que fueron atacados de la misma forma que se lleva haciendo durante todo este año y el anterior. Según los datos que maneja el Cuerpo, se están alcanzando las cifras del año 2010, con quemas de casi doscientos vehículos y sin que se haya conseguido la detención de los implicados en estos delitos.
La Policía sí ha detenido a individuos que han participado en quemas que esconden fraudes o venganzas, pero no ha conseguido avanzar en las bandas que están detrás de estos atentados premeditados.