El titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Ceuta toma declaración este lunes en calidad de investigado al presidente de la Gestora del PSOE, Melchor León.
Lo hace tras la denuncia interpuesta por una trabajadora del Grupo Parlamentario Socialista tras la difusión en un chat del partido de su parte médico por incapacidad temporal.
Al juzgado ha acudido también la trabajadora del PSOE que presentó la denuncia que ha dado pie a este caso.
Ha acudido para ser revisada por el forense.
León ha llegado a las 8.30 horas, pero se le ha advertido de que hasta las nueve no podía pasar.
Ha sido citado formalmente por el juzgado para que acuda asistido de su abogado, advirtiéndole de su obligación de comparecer ya que de no alegar causa justa que se lo impida, esa citación podrá convertirse en orden de detención.
No ha hecho falta, ha comparecido acompañado del portavoz del Grupo, Sebastián Guerrero, quien ha esperado fuera de los juzgados.
Su declaración se ha suspendido ya que la acusación lo solicitó el viernes, no el abogado de León como este periódico había publicado inicialmente.
Se le había citado en el marco de las actuaciones judiciales seguidas por la presunta comisión de un delito de descubrimiento y revelación de secretos del artículo 197 del Código Penal.
Los hechos a los que hace referencia esta decisión judicial tienen su origen en lo ocurrido a finales de junio de este año, cuando una trabajadora del Grupo Parlamentario Socialista que se encontraba de baja fue informada de que su parte médico, que contenía datos sensibles y referidos a su intimidad, había sido difundido en un chat de la Gestora por su presidente Melchor León.
Esa baja laboral, documento interno alusivo a una situación personal privada, se colgó en un chat en el que interactúan componentes de la Gestora sin contar con permiso de la afectada, que se enteró de que se había compartido su situación y el motivo de su baja por terceras personas.
Eso llevó a la presentación de una denuncia en la Jefatura Superior de Policía al haberse compartido un documento en el que se expresaban las razones de esa baja, ante un posible caso de revelación de datos que afectaban a su intimidad.
Tras un sobreseimiento inicial el auto fue recurrido y estimado lo que provoca la reapertura de las actuaciones por la difusión de una información reservada y sensible.