Música con voz de mujer. ‘Una rosa en el piano’ trae a Ceuta la figura de la compositora Rosa García Ascot este jueves en el Conservatorio Profesional de Ceuta Ángel García Ruiz. El concierto conjugará las obras de esta artista con la literatura y las ilustraciones en una actividad impulsada entre el centro educativo y el CEIP La Navata, de Madrid.
Las palabras de Patricia García, docente y musicóloga, acompañarán las notas musicales de este concierto en la sala orquestal del centro a las 19:30 horas este jueves. A ellas se unirán las ilustraciones de María del Carmen Pichardo.
Las obras que se expondrán de Rosa García son solo parte de toda su creación que, en parte, se ha perdido con el paso del tiempo. Se trata de una compositora que ha sido rescatada en los últimos años. García Ascot pertenece al ‘Grupo de los ocho’, que podría traducirse a la ‘Generación del 27’ de la música. Ella desarrolló su carrera en el siglo XX y que estudió junto a otros artistas relevantes como Manuel de Falla o Enrique Granados.
Varios centros educativos y conservatorios de España junto con una academia británica se han sumado a esta actividad pedagógica para valorar la presencia de Rosa García dentro de la música, una actividad que forma parte del Plan de Igualdad del conservatorio ceutí.
A raíz de esta actividad los alumnos no solo interpretarán el cuento, también, han elaborado cómics e incluso marionetas en torno a esta actividad cultural. Los estudiantes de los centros y del conservatorio participarán en la lectura del cuento, así como en la interpretación de las piezas musicales.
Referentes femeninos en el conservatorio
‘Una rosa en el piano’ hace un claro guiño a la propia compositora que va a darse a conocer en el conservatorio este jueves. El proyecto es parte de la iniciativa del centro que trabaja por la igualdad en la música.
El conservatorio comenzó con esta labor hace unos seis años y desde entonces se han incluido obras de alrededor de veinte compositoras es distintas áreas, no solo en música clásica, también, por ejemplo, para creadoras de tablaturas para guitarras.
“Las obras que van a tocar las hemos incluido en nuestra programación. Es uno de los objetivos que se pretende, el dar visibilidad a las mujeres en todas las artes. En nuestro currículum, hace unos años no existía ninguna obra de una compositora”, explica Cristina Querol, profesora del centro.
La musicología feminista es una rama de conocimiento que no empezó a desarrollarse hasta los años ochenta y, desde entonces, se han descubierto en torno a 9.000 compositoras, mujeres con un talento que, en un mundo donde los hombres tenían prevalencia, quedó escondido. Sus obras regresan al presente para darles el papel que antes lo lograron tener.
Las compositoras han estado presentes en todas las épocas artísticas e históricas, desde la medieval, como es el caso de Hildegarda de Bingen, hasta tiempos actuales. Algunas de ellas incluso quedaron a la sombra de reconocidos músicos como es el caso de Maria Anna Mozart, hermana de Mozart, de la que no se conserva ninguna partitura o Fanny Mendelssohn, hermana de Felix Mendelssohn. “A ella le costó publicar sus composiciones porque su hermano no la dejaba. Muchas veces firmaba como F, porque se llamaba Fanny, para que pensaran que era un hombre; que era Feliz”, detalla Querol.
“Siempre que pensamos en composiciones, se nos viene la imagen de compositores. Creo que a todos los ha pasado, incluso a los que hemos estudiado música desde jóvenes”, señala Querol. “La importancia de darlas a conocer y que sean referentes para los niños y niñas es fundamental”, concluye.
