El sector pesquero ceutí lleva años siendo casi testimonial, siendo Marruecos el principal proveedor de pescado para la ciudad hasta que en febrero el país vecino impidió su paso por la frontera. Por eso, Vox Ceuta llevó al Senado la difícil situación de este colectivo recordando cómo en las dos ciudades autónomas se ha pasado de tener “una importante industria auxiliar, con factorías de conservas y salazones de pescado, a tener menos de una veintena de barcos en comparación con décadas pasadas, en las que existían más de doscientos barcos solo en Ceuta”.
El partido preguntaba al Gobierno por qué no se ha evitado el declive de este sector, siendo responsabilidad del Estado, así cómo si tiene pensado apoyar a las Cofradías de Pescadores de ambas ciudades autónomas. Ahora, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha contestado a la senadora de Vox por Ceuta, Yolanda Merelo, que la evolución del sector pesquero en Ceuta y Melilla “no ha diferido de la del resto de sectores pesqueros de su
ámbito, ya que se ha producido un descenso del número de buques activos principalmente derivada de la mala situación de los recursos pesqueros del Mediterráneo en las últimas décadas”.
Además, el Gobierno se desentiende de la situación alegando que las competencias en materia acuicultura y marisqueo, pesca recreativa o industria, son competencias transferidas por la Administración General del Estado a las ciudades autónomas.
Mientras, no habla de medidas concretas para reflotar el sector pesquero en Ceuta aunque, eso sí, señala que en el caso particular de la ciudad, está considerado como organismo intermedio de gestión del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca. Y, según expone el Ejecutivo, en el actual programa operativo cuenta con 1,6 millones de euros para el apoyo de sus prioridades en materia pesquera.
“Esta respuesta es una evidencia más de la falta de interés que el Gobierno central tiene por los problemas que aquejan a nuestra ciudad”, denuncia el presidente de Vox Ceuta, Juan Sergio Redondo. Asegura que “la dejadez es absoluta y manifiesta” y critica que el Gobierno “no solo reduce los recursos económicos de la ciudad, demorando o simplemente posponiendo sine die la llegada de las correspondientes aportaciones
económicas que el Estado transfiere a la Ciudad Autónoma, sino que además, tampoco está dispuesto a mostrar disposición alguna para incentivar sectores económicos”. Es el caso de la pesca que, apunta Redondo, “podría aliviar de algún modo la difícil situación de acceso al trabajo que padece la ciudad” si se ayuda “a poner las bases que garanticen cierta suficiencia local en lo que al suministro de pescado fresco se refiere”.
“Una vez más el Gobierno de Pedro Sánchez se lava las manos y lanza la pelota al tejado de la Ciudad Autónoma, desentendiéndose de los problemas del sector de la pesca”, critica el presidente de Vox Ceuta. Y es que, Redondo incide en que el sector de la pesca, de contar con inversiones y una implicación directa por parte del Estado, “podría aportar esa importante fuente de recursos y medios que garantizarán su reactivación y
complementasen el difícil desarrollo económico y laboral que actualmente existe en Ceuta”.
Redondo recuerda además que Vox Ceuta ya llevó a Pleno de la Asamblea en esta legislatura una propuesta apoyada por unanimidad en la que se planteaba la necesidad de potenciar las instalaciones pesqueras de la ciudad como la lonja y el puerto pesquero.
El objetivo era integrar la industria pesquera local en un proyecto mayor donde sostenibilidad, ocio y Medio Ambiente permitan hacer que la pesca “también sirva de motor para otros sectores de desarrollo económico como el turismo”.
Pescado de Marruecos vía Algeciras
Mientras, el pescado que se consume en Ceuta llega de Marruecos. Antes directamente a través de la frontera y ahora tras ser trasladado de Tánger a Algeciras para pasar de nuevo el Estrecho de Gibraltar hasta la ciudad. Un proceso por el que también preguntó en las Cortes Generales, en este caso, la diputada nacional de Vox por Ceuta, Teresa López para conocer si se presentaba la documentación necesaria como el certificado de
captura.
Ahora el Gobierno ha respondido a López y lo vuelve a hacer desentendiéndose de lo relacionado con el sector pesquero. El Ejecutivo se remite a enumerar la normativa a cumplir y señala que solo en los casos en los que la mercancía cumpla todos los requisitos se emite un informe favorable para que pase por la aduana. “Si no es así, la mercancía es denegada pudiendo ser incautada”, se señala.
Mientras, en los últimos meses de 2019, fueron varias las informaciones que aparecieron sobre los importadores de pescado fresco de Marruecos, que barajaban suspender su actividad comercial en el Puerto de Algeciras ante la situación "insostenible" que estaba atravesando el Puesto de Inspección Fronterizo (PIF). Las fuertes esperas y el colapso de la operativa estaban perjudicando a la calidad del producto y a la imagen de las empresas ante sus proveedores, según denunciaba la Asociación de Importadores de Productos Perecederos del Puerto de Algeciras (Aimpa).
“El Gobierno también se desentiende de la entrada de productos procedentes de Marruecos sin trazabilidad”, afirma Redondo para denunciar que esto también supone una “deslealtad para con las capturas que se introducen en las lonjas españolas”. “Ese pescado, de forma indirecta, acaba en Ceuta sin poder comprobar la trazabilidad y el Ejecutivo, una vez más, no tiene nada que decir”, critica el líder de Vox Ceuta.