Ya lo había anunciado Verdejo en un punto anterior, que esta
propuesta del PSOE iba a generar controversia, y así lo fue. El punto elevado por el Grupo Socialista al Pleno de la Asamblea relativa a diversos extremos
sobre la violencia de género derivó en un debate paralelo sobre la postura
de Vox ante este tema. Ya en el punto tercero de la propuesta que presentó Manuel Hernández se hacía alusión directa a la formación de Verdejo, ya que pedía rechazar cualquier posicionamiento político que negara la existencia de la violencia de género y que estuviera en contra del Pacto Nacional contra la Violencia de Género. El portavoz socialista aludió a toda la lucha que se lleva haciendo desde los años 90 para lograr la erradicación de esta violencia y la importancia de que la Ciudad se comprometa a continuar con esta lucha, así como reforzar los programas de protección y el apoyo a las organizaciones que también trabajan en pro de la erradicación de la violencia machista. Tras la exposición de hechos del PSOE, el primero en contestar fue el portavoz de Vox, Carlos Verdejo, quien tachó la propuesta de “pura demagogia”, asumiendo que toda su intervención sería criticado en el resto del debate. “Sé que luego van a ir todos contra mí”, adelantó el de Vox y no se equivocaba, ya que sus palabras no dejaron indiferente al resto de grupos parlamentario que se centró en contestar al de Vox más que opinar sobre la propuesta socialista. Verdejo llegó a comparar al PSOE con el gobierno del líder norcoreano Kim Jong-un y su sistema de acusación, asemejando una denuncia contra un hombre por violencia de género a cuando alguien en Corea del Norte delata a un contrario al régimen del dictador asiático. “En Corea del Norte si el vecino delata al de enfrente que han hablado mal del líder, esa personas va a un campo de concentración, y eso es lo que pasa con esta Ley Integral de la Violencia de Género, que hace que cientos de hombres, aunque sean inocentes, vayan a la cárcel”, detalló Verdejo. Aseguraron que se dan denuncias falsas y que muchas de ellas se producen los viernes, haciendo pasar un episodio “traumático” a esos hombres que deben permanecer, según Verdejo, “todo el fin de semana” compartiendo calabozo con “asesinos y alcohólicos”. Desde Vox defendieron que no sea una lucha contra la violencia de género, aludiendo a su ya mítica frase de que “la violencia no tiene género” y que la ley actual se modifique por una ley de violencia intrafamiliar, que incluya a todos los miembros del núcleo familiar como lo menores, ancianos y también hombres. Inciden en que están a favor de la cadena perpetua para los asesinos de mujeres y los violadores, achacando a Hernández que su partido deja estas personas “en la calle”. “El PSOE nos dice que justificamos la violencia. Nosotros queremos que los asesinos y violadores estén en la cárcel, pero no vamos a permitir que los inocentes estén en la cárcel”, apostilló Verdejo y aludió a otras causas de muerte, como es el suicidio, que afecta a más hombres que a mujeres y no por ello se ha elaborado un plan específico.
La contestación a Vox
La primera en contestar al “juez Verdejo”, como así lo definió,
fue Fatima Hamed, quien le pidió prudencia a la hora de cuestionar la separación de poderes en nuestro país. Le refutó al de Vox que por una acusación de maltrato una persona pase un fin de semana entero en un calabozo, informándole de que en Ceuta se pasa a disposición judicial a diario, negando que su afirmación fuera cierta. Pidió “un poquito de empatía, sensibilidad y realidad” y basándose en dato de la Fiscalía General del Estado, echó por tierra la teoría de Vox sobre las denuncias falsas asegurando que representan un 0,006% de todas las denuncias que sí pasan a trámite. “La cuestión que estamos haciendo es lo suficientemente seria para que haga comparaciones”, le pidió Hamed a Verdejo. Mohamed Ali también negó las afirmaciones de Vox sobre la falta a la presunción de inocencia hacia los hombres que se denuncian y declaró que no se sorprendía por esta exposición que hizo Verdejo ya que se contempla dentro del ideario de Vox. Aludiendo a su experiencia como abogado, Ali le contestó sobre los protocolos que se llevan a cabo y que no son tal y como los relata Vox, asumiendo que existen unos mecanismos para cerciorar si un hombre debe o no ingresar en prisión. En su segundo turno de palabra, Manuel Hernández acusó a Vox de irrumpir en la política para alterar la unidad constitucional que se guardaba respecto a este tema y que quedó plasmado en el Pacto Nacional contra la Violencia de Género que ahora esta formación rechaza, mientras que el resto lo suscribe. “Intentan dinamitar esta unidad institucional contra la violencia machista”, le acusó.
La votación partida y una transaccional
Javier Guerrero, como portavoz en este punto del grupo popular, fue el único que no entró a dirimir las declaraciones de Verdejo y se limitó a solicitar el voto fraccionado de la propuesta en los cuatro puntos que incluía, solicitando una transaccional al tercer punto que modificaba su contenido. Ésta fue rechazada por el grupo proponente, por lo que se adhirió como un quinto punto. De todos ellos, salvo el tercero, se aprobaron con los votos de todos los partidos salvo los seis de Vox y en el caso del tercero, no llegó a aprobación porque sólo obtuvo el apoyo de PSOE, MDyC y Caballas, frente a los votos en contra de Vox y PP.