Las inmediaciones de la cárcel de Los Rosales vuelven a convertirse en una auténtica escombrera en Ceuta. Y no es porque no se haya actuado con anterioridad en este lugar, sino porque después de la limpieza continúan echándose restos de todo tipo pero sobre todo material de obra. Eso es lo que llama la atención, la cantidad de escombros abandonados en este lugar en vez de depositarlos en el lugar habilitado para ello.
El recorrido por las inmediaciones de la vieja penitenciaría muestra una realidad vergonzosa, ejemplo del incivismo claro de quienes no dudan en acudir a este lugar para dejar los restos, en vez de seguir las vías reglamentarias.
Solo en 2019, Tragsa retiró de distintos puntos de Ceuta más de 4,6 millones de kilos de escombros. Y específicamente en enero de este mismo año limpió el entorno de la cárcel invirtiendo más de 65.000 euros y retirando 500.000 kilos de escombros y otros residuos. En breve se verá obligada a hacer otra limpieza retirando restos que incluso invaden la carretera por donde tienen que circular los vehículos.
Un efecto contaminador y una mala imagen
A los escombros se suman restos de casas que son dejados en este lugar como si fuera un gran vertedero, extintores o incluso muebles, colchones, maletas… todo lo que sobra termina en este lugar. El problema de la acumulación de escombros se extiende a otros lugares de Ceuta e incluso al monte, convirtiéndose en un grave problema para la ciudad.
No es solo el efecto contaminador, sino la imagen que se da de una ciudad en la que parece que existe un empecinamiento por parte de distintos sectores sociales por no cumplir las normas establecidas y seguir incurriendo en este tipo de comportamientos. Ni los consejos, ni las normas dictadas, ni los mensajes, sanciones o advertencias calan porque se sigue haciendo lo que no se debe.
La queja de UGT
Por su parte el comité de empresa de Trace (UGT) ha querido denunciar la falta de civismo en nuestra ciudad. “Desde el comienzo de la pandemia que cerraron la frontera se ha triplicado nuestro trabajo, pero eso no nos preocupa porque para eso nos pagan, lo más preocupante es la falta de civismo y la formas de depositar el RSU y los enseres en los distintos puntos de contenedores”, especifican.
Desde UGT hacen un llamamiento a la ciudadanía para pedir más civismo y colaboración a la hora de depositar los enseres en el punto de contenedor: “Queremos hacer ver el famoso lema que dice, no es más limpio el que más limpia, si no el que menos ensucia”. Pero también “exigimos al Gobierno de la ciudad que se hagan cumplir las ordenanzas municipales de limpieza, de nada sirve tenerlas si no lleva a la práctica, hoy más que nunca se necesita”.
Lo que hay que hacer es dotar de cámaras todas las zonas de escombreras ilegales, como esta que nos ocupa, para detectar a todos estos incivilizados, para luego sancionarlos como corresponde a semejantes conductas y lo mismo procede hacer con las habituales zonas de quemas. Seguro que todos estos problemas se acaban de raíz. Sancionando a quien no sabe ser civilizado y vivir en sociedad, que no en suciedad. Y si no quien pagar las multas pues que a los infractores se les cierren el paso a las ayudas sociales. Y esto es tan sencillo como hacer una consulta popular y si la ciudadanía lo aprueba, ya nadie podrá decir que son medidas anticiudadanas.
CEUTA CIUDAD INSEGURA Y SUCIA. Y SIN DETENCION NINGUNA. VIVA LA DELEGACION
Diariamente se ven cantidad de las llamadas "vespas" cargadas de escombro y otros mobiliarios domésticos dirigirse a ese lugar y Arcos quebrados en el Príncipe. Es que las autoridades no los ven? es que es muy fácil verlos a plena luz del día pero al parecer no quieren cumplir con su cometido.
Donde hay americanos hay escombros y basura .
NO FALLA