A falta de prácticamente un mes para la celebración de la
Fiesta del Sacrificio, Eid Al Adha, los veterinarios municipales han empezado a mirar las explotaciones que recibirán los primeros
corderos para su venta en Ceuta.
Los
mataderos móviles ya están siendo colocados en los puntos fijos donde se autoriza,
al igual que el pasado año, el sacrificio del cordero. El objetivo es tenerlo todo preparado de cara a esa jornada importante para la
comunidad musulmana, señalada en rojo en el calendario para el próximo 17 de junio.
Tal y como han indicado fuentes de la Ciudad Autónoma, se están dando los pasos cumpliéndose con el calendario previsto, aunque todavía hay muchos ganaderos que no han entregado las guías.
En relación a la inquietud que anidaba en la comunidad musulmana
ante la carestía y escasez de ganado ovino, de momento no se han trasladado datos que apunten a que esto pueda llegar a producirse.
El pasado año, el precio por cabeza de cada animal se movía entre 250 y 300 euros, pero este 2024 podría registrarse un aumento hasta llegar a los 350. Son precios estimados porque el sector ganadero no ha concretado todavía el montante final.
A este respecto la asociación
Acohace ha pedido a la Ciudad que controle esa moderación en el precio del cordero para evitar los aumentos temidos, lo que repercutiría en las familias que no puedan comprar uno de estos animales para la fiesta.
Para la entidad, se considera “vital que el Gobierno local tome cartas en el asunto, de modo que reduzca el IPSI de estos animales al tiempo que regule su importación y establezca precios orientativos y recomendables. La naturaleza de la festividad así lo exige, tanto como que la misma deje de ser un negocio fabuloso para unos cuantos en detrimento de toda una comunidad”, denunciaron buscando la intervención de la propia institución municipal en este asunto.