La situación que viven los vecinos de San Amaro de Ceuta con unos terrenos que hay en el barrio, que son inutilizables y solo sirven para acumular basura, es algo que llevan arrastrando durante años. La situación es insostenible y su presidente, Manuel Díaz Martín, lucha para conseguir lo que reclaman sus vecinos.
Entre otras cosas, llevan años reclamando la construcción de un parque infantil para que los niños puedan jugar y no tengan que irse a otro punto de la ciudad o incluso hacerlo en las calles. Además piden un local social donde se puedan reunir y realizar diferentes actividades. Es de las pocas barriadas de Ceuta que carece de todo ello.
Por todos estos motivos, los vecinos saldrán a la calle a protestar y han convocado una manifestación pacífica en la carretera principal de San Amaro para el próximo 15 de diciembre. Los vecinos insisten en “la dejadez” por parte del Gobierno local, ya que esos terrenos eran de Defensa, un motivo por el que siempre se salvaguardaba el Ejecutivo local, pero en julio del año pasado ya firmaron un convenio que pasaba a posesión del Gobierno de Juan Vivas.
En julio del año pasado, las parcelas que eran de Defensa pasaron a ser del Ejecutivo local
Por esa situación, los vecinos señalan que llevan tiempo “tomándole el pelo” a la barriada, sin que se inicien los proyectos que llevan propuestos “desde hace un año”. En esas promesas se centraba la construcción de un parque infantil, un local social y zonas ajardinadas, entre otras. “Es un vergüenza que cada vez que se pregunte al Ejecutivo local no den respuestas y ahora se señale que es patrimonio. El día 15 reivindicamos lo que creemos que como barriada merecemos, al igual que otras de la ciudad”.
Las parcelas llevan deshabitadas desde hace unos años y la acumulación de basura hace que el olor sea insoportable para los vecinos. Además, al ser un lugar de difícil acceso para los empleados de la limpieza ya que en su mayoría son puntos que se encuentran cerrados por todas partes, hace que cada vez prolifere más los insectos y animales de todo tipo como las ratas. Estas se introducen dentro de las viviendas de los vecinos al ser de planta baja, lo que les desespera.
Los vecinos entienden que han tenido la paciencia “necesaria” y ya es hora de alzar la voz para ser escuchados por parte del Gobierno local. Es una situación que se alarga en el tiempo y que no encuentran la solución, ni la respuesta esperada. El día 15, miércoles y aún por concretar la hora, se echarán a la calle para pedir una mejora en toda su barriada.