Pasarlo de miedo es el objetivo que se han marcado en Parques de Ceuta para esta larga tarde de Halloween. Una terrorífico local social que ha sido invadido por siniestras brujas, fantasmas, esqueletos, calabazas, vampiros, arañas y hasta las tumbas de sus antepasados.
Entre susto y susto, todos los niños y no tan niños de la barriada con sus disfraces han podido disfrutar de una merienda ambientada en Halloween que han hecho entre los propios vecinos con todo su cariño. Y es que además de pasar un rato aterrador en un auténtico ambiente de Halloween, también ha habido oportunidad para dar algún que otro susto.
Ha habido tiempo para el ‘truco o trato’ y para probar algunas de las golosinas que los vecinos colocaron sobre una mesa. Todos han ido pasando en grupos para recoger sus chuches y caramelos de Halloween.
Unos 60 niños, además de disfrutar de una gran merienda, han podido guardar sus recuerdos en un photocall hecho para la ocasión. Una manera de tenerlos para siempre en la memoria que a buen seguro se volverá a repetir el próximo año.
Una fiesta gracias al esfuerzo de los vecinos
La decoración más terrorífica se ha adueñado de este local social en una divertida tarde en la que todos han disfrutado de una jornada fuera de lo habitual. Cada año esta festividad va adquiriendo más arraigo y más ciudadanos se animan a celebrarla.
La fiesta ha sido posible gracias a que todos los vecinos de Parques de Ceuta han hecho un gran esfuerzo y cada uno ha colaborado aportando su granito de arena para que esta ‘local del miedo’ fuera una realidad.
Halloween ha llegado para quedarse en nuestra ciudad y los pequeños crecen con la ilusión de disfrazarse terroríficamente por un día, años tras años, además de pegar algún susto que otros.