La caminata diaria por la Carretera Nueva se ha visto interrumpida esta mañana por el avistamiento de un pez luna a escasos dos metros de la orilla, en la playa de la Almadraba, a la altura del nuevo paso elevado en construcción de Miramar Bajo.
Por sus dimensiones, los viandantes han llegado a confundir el ejemplar con un delfín o una tortuga hasta que, al acercarse, han comprobado que se trataba de un pez luna, unos especímenes que además de anchos son pesados.
Los testigos han señalado que el animal daba vueltas en círculos, con una aleta dorsal bastante grande y otra ventral. Aparentemente estaba herido y se ha aproximado a la costa hasta quedar varado, han apuntado las mismas personas.
El Centro de Estudios y Conservación de Animales Marinos (CECAM) ha confirmado que el ejemplar ha quedado embarrancado en la orilla.
La adjudicataria del servicio de recogida de animales muertos, Athisa, ha recibido el aviso del varamiento este sábado pasadas las 16.00 horas. La empresa sospecha que puede que volviese al mar de alguna forma y por ese motivo no ha tenido constancia hasta que ha vuelto a aparecer, unas 24 horas después.
El Plan de Varamientos de la Ciudad Autónoma contempla la recogida de cetáceos y tortugas pero, aunque el pez luna ni es de interés biológico ni está protegido, también se retira al igual que cualquier otro animal muerto que pasa a depositarse en sus cámaras de congelación.
Por el lugar del hallazgo, el especimen podría haber quedado atrapado en las mallas de la almadraba, como ya ha ocurrido en ocasiones anteriores.
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