Estoy harto de escuchar que ahora es importante el Valor de lo “público” y siempre en contraposición a lo Privado. Como si lo “público” nos fuera a salvar de la catástrofe económica que se avecina. Pero la verdad es que nada ha cambiado, sólo saldremos de esta crisis, como de todas las crisis cuando los empresarios, no el estado, no el gobierno, empiecen a crear riqueza, ni los gobiernos ni ningún ente público va a sacarnos de esta crisis.
En este momento el valor de lo público, es que el gobierno tome medidas para facilitar a las empresas que puedan despegar. Para ello es fundamental que se tenga claro que la recaudación por impuestos va a ser ridícula y así tendrá que seguir siendo mientras las empresas no empiecen a obtener valor añadido, mientras el gobierno deberá minimizar, en todo lo posible, el gasto público superfluo, ya sabemos todos los que somos funcionarios que nos tendrán que recortar los salarios, pero con eso no bastará, habrá que olvidar todas las subvenciones a todo tipo de entidades que no sean vitales.
Las autonomías deberán hacer lo mismo que el gobierno central, reducir el gasto público al mínimo justo y necesario para sobrevivir y con ello facilitar en todo lo posible el despegue de lo privado, para ello podría ser necesario, rebajar e incluso anular determinados impuestos, facilitar la creación de empresas minimizando, de verdad, la burocracia necesaria para ello y abaratando la cuota empresarial de cotización a la seguridad social y eliminar, de inmediato, el salario mínimo, que sólo hará rígidas las contrataciones y en la mayoría de los casos inviable directamente. El Trabajo es lo primero, desde un puesto de trabajo, aunque sea precario podremos salir de una situación de pobreza o podremos mejorar esa situación.
Si lo que hacemos es justo lo contrario, es decir, otorgar una paga que desincentive la búsqueda de un empleo o en el mejor de los casos encarecerá la contratación y dificultará el despegue de las empresas, ahora con muchas dificultades, de liquidez y financiación. Si a todo esto unimos el mantenimiento de los impuestos o incluso la subida de los mismos, como consecuencia de un aumento del gasto público, nunca saldremos de la crisis, alargaremos en el tiempo la duración de la misma y acabaremos necesitando mas y mas dinero, pero cada vez con una recaudación menor ya que la actividad productiva se reducirá. El final de todo esto será una quita de la deuda pública Española que redundará lógicamente en un encarecimiento de la financiación, osea subida de la prima de riesgo y volveríamos a entrar en una espiral de pago de intereses cada vez mas elevados, subida de impuestos para poder pagarlos, decrecimiento de la actividad productiva, ya que con unos impuestos altos lo que se obtiene es un desincentivo para la actividad privada.
En definitiva o damos comienzo a la austeridad en los presupuestos de los distintos gobiernos o vamos directamente al empobrecimiento generalizado de nuestra sociedad sin posibilidad de recuperación. Todos sabemos lo que pasa si la actividad privada no funciona.
ES HORA DE PENSAR EN LA ACTIVIDAD PRIVADA O TENDREMOS PARO Y POBREZA GENERALIZADA.