La Unión de Guardias Civiles (UniónGC) ha registrado este lunes en la Jefatura de la Zona de la Guardia Civil de Cantabria, un escrito en el que denuncia que de manera periódica se vienen comisionando a componentes de la USECIC de Cantabria en labores de vigilancia de las fronteras de España con Marruecos (Ceuta y Melilla), solicitando se revierta esta orden.
Desde UniónGC solicitan al Ministerio del Interior que se cese en el "abuso de derecho y la desviación de poder" en la que incurre, y se adopten las medidas necesarias para que los puestos fronterizos de Ceuta y Melilla sean dotados con el personal permanente que sea necesario.
Contraviene el marco jurídico, según la asociación
En UniónGC entienden que estas comisiones contravienen el marco jurídico que las regula. En primer lugar, por la necesidad de motivación de los actos realizados por la administración. Esta motivación busca que no se tomen "de forma arbitraria" y que exista "un control" de la legalidad de los actos administrativos.
En segundo lugar, destaca que los puestos a ocupar son 20 vacantes que existen en el puesto fronterizo de Ceuta, los cuales llevan cubriéndose con comisiones de servicio "desde hace mas de tres años", en algunos casos comisionando al personal "de forma forzosa", denuncia UniónGC.
"Esto demuestra la dejadez de la Dirección General de la Guardia Civil para cubrir la demanda de ciertos puestos de trabajo, empleando para ello los mecanismos necesarios", ha explicado la asociación de guardias civiles.
Por último, entienden desde UniónGC que existe una "desviación de poder y abuso de derecho" por parte de la Administración, "contraviniendo el espíritu de la ley, no especificado los motivos extraordinarios que motivan dicha comisión, pues las circunstancias que acaecen en los puestos fronterizos de Ceuta y Melilla, lejos de ser extraordinarias, se han convertido en necesidades habituales, que debían haber sido subsanadas con personal destinado y no comisionado".
"Forzosos", "quebranto económico" y "suspensión de permisos"
Desde UniónGC consideran que estas decisiones están causando "una serie de problemas" a todos los guardias civiles destinados en este tipo de unidades. Primero, por "lo forzoso" de la comisión en algunos de los casos. Además, por la "vulneración" de los derechos en materia conciliación de la vida laboral y familiar de los agentes afectados.
La entidad también resalta los "quebrantos" económicos, "al haber sido suspendidos los periodos de permisos que estaban solicitados, para fechas coincidentes con la comisión".
Esta situación provoca, según denuncia la asociación, la "merma" de personal que se produce en todas las comandancias afectadas y en concreto en la de Cantabria, donde esta unidad es un importante pilar, tanto en la prevención de delitos como en el apoyo a otras unidades, en situaciones comprometidas.