La Unión de Oficiales de la Guardia Civil ha lamentado que después de dos archivos de la causa seguida en el Juzgado de Instrucción número 6 de Ceuta por los sucesos acontecidos el 6 de febrero de 2014 se haya dado un giro radical, viéndose indicios de delito en la actuación de los guardias civiles que prestaron servicio aquella fatídica jornada. La UO considera que el auto incurre además en varias contradicciones.
“Lamentamos que tras dos archivos anteriores donde se evidenciaba la inexistencia de responsabilidad penal, ahora, la señora instructora de la causa, con la misma carga de pruebas, vea indicios de delito en la actuación de los guardias civiles que actuaron en la Frontera del Tarajal (Ceuta)”, expone la UO en un comunicado remitido a El Faro. “El auto que se nos traslada incurre en no pocas contradicciones. Por ejemplo, al acordar el archivo de las actuaciones respecto a determinados delitos indica que los agentes obraron defendiendo las fronteras, como es su deber. Del mismo modo estaban actuando cuando trataban de repeler la entrada por el mar y lo hacían con los medios oficiales dotados por el Estado. Es más, el propio auto reconoce la complicación que supone para los agentes de la Guardia Civil el rechazo en frontera en el ámbito marítimo, pues en el mar no hay elementos de contención fronteriza, por lo que mal puede hablarse de arbitrariedad, siendo ésta inexistente en el caso de autos”.
Asistencia jurídica a los afectados
La Unión de Oficiales de la Guardia Civil ha estado prestando, desde el principio, asistencia jurídica y apoyo a los agentes afectados. Dicha asistencia se mantendrá hasta que finalice la causa. De hecho, los servicios jurídicos de la asociación ya están trabajando en orden a impugnar el Auto de 24 de septiembre, mediante el correspondiente recurso de reforma.
“Esta Asociación profesional de mandos del Cuerpo quiere hacer público que los guardias civiles, con independencia de su rango, nos sentimos profundamente desamparados y desprotegidos por parte de los diferentes gobiernos en situaciones como la que nos ocupa, cuando no hacemos otra cosa que cumplir con lo que se nos encomienda que, como en este caso, es impermeabilizar la frontera española, y lo hacemos con los medios oficiales con los que el Estado nos dota. Esto evidencia que no solo está en riesgo la vida e integridad física de los guardias civiles, sino también la seguridad jurídica en sus actuaciones”, expone.
La Unión de Oficiales tiene claro que no van a dejar a su suerte a los compañeros de la Guardia Civil y a sus familias, insistiendo en su defensa hasta que llegue el final de este proceso. El contenido del auto ha sido un jarro de agua fría para los agentes de la Comandancia de la ciudad autónoma.