Como todos sabemos, Ceuta al ser una ciudad pequeña que alberga diferentes culturas es especial. En el ámbito académico encontramos diferentes personas con grandes sueños, personas que desean seguir estudiando, que les agrada el ambiente de estar entre los libros, de entender y de pensar.
Al vivir en una ciudad con personas de diferentes culturas e idiosincrasias, confluyen diferentes idiomas como cualquier ciudad cosmopolita del mundo y como tal hay dos idiomas mayoritarios el español y el dariya, idioma materno para muchos alumnos y del vecino país Marruecos.
Zakarias es un chico responsable, atento, con ganas de estudiar y que nunca falta a clase. Antes estudiaba en Tetuán, pero su padre se tuvo que desplazar a nuestra ciudad por motivos personales, así que se tuvo que mudar a Ceuta.
Zakarias llego al instituto Siete Colinas (IES), donde tuvo la posibilidad de seguir estudiando un grado medio de ‘Frío y Calor’. Se llevó una grata sorpresa cuando un grupo de alumnos, guiados por el profesor Alfonso Pérez, tuvieron la idea de incluir en los videos que el profesor Pérez graba en YouTube para facilitar el estudio la lengua dariya, para ayudar a la compresión del español y fomentar la integración social de los alumnos. Así que comenzó con ellos a grabar diferentes videos que contemplan temas de la guía docente: el circuito, cómo se calcula la tensión, los ohmios y los amperios; diferencias entre circuitos paralelos, mixtos, en serie; etc.
Lo mejor de todo para nosotros, los alumnos, es que esos videos explicados en español, también los explicaban los compañeros de clase que hablan dariya para compañeros como Zakarias, que podía entenderlo en lo que su dominio del español mejora. A él le gustó tanto la idea que grabó diferentes videos para ayudar y ayudarse a ampliar la integración social. Su pasión es estudiar, por eso le pareció muy considerado y amable por parte de los alumnos, y también del profesor que pensara en ellos, que los tuviera en cuenta, que les facilitará el aprendizaje.
Una de las mejores cosas que puede pasarle a una sociedad es pensar en los demás. Personas simples, comunes, alumnos y profesores, institutos como el ‘Siete Colinas’, en una pequeña ciudad como Ceuta, favorecen a todos por igual, sin discriminación alguna. Esperamos que, con el tiempo, nuestros centros de estudio en Ceuta incluyan esta magnífica idea de explicar en diferentes idiomas.
Antes de terminar, quisiera dar las gracias a don Alfonso Pérez (persona del cual nace la idea), don Bruno (director del Siete Colinas) y al mismo centro educativo por ser tan especial como es. A pesar de haber terminado mi tiempo en el ‘Siete Colinas’, seguiré apoyando al profesor don Alfonso Pérez a que este proyecto que nació el pasado año educativo siga adelante muchos años más.
(*) Estudiante.