Una enfermedad menos peligrosa que el colesterol

Los expertos insisten en que la detección precoz del cáncer de mama propicia su reversibilidad, cuyos números en Ceuta se acerca al 90% de las diagnosticadas como positivas

El cáncer no es como hace unos años. Algunos expertos sostienen que el de mama es incluso menos peligroso que el colesterol. Los avances médicos han sido asombrosos en los últimas décadas, tanto que casi nueve de cada diez mujeres se curan de cáncer de mama en Ceuta, “siempre que haya habido previamente una detección precoz de la enfermedad”. En eso radica la clave, en que el médico sepa de la aparición del tumor en una fase inicial, aseguró José María Sánchez, responsable del Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama  de la Ciudad.

Hoy se celebra el Día Internacional del Cáncer de Mama, cuya campaña repite cada año las claves de esta patología que ha pasado a estar casi controlada en las sociedades occidentales. El diagnóstico precoz se antoja por tanto vital.  De ahí que Ciudad e Ingesa iniciaran una colaboración hace diez años para lograr que las mujeres ceutíes dispongan de un control puntual de su estado de salud. “Este programa va dirigido a mujeres entre 45 y 69 años –explicó Sánchez–. La recomendación es hacerse una mamografía cada dos años. Y anualmente si existe algún antecedente familiar directo que haya padecido el cáncer de mama”.

Los datos son reveladores y van en aumento. Son ya más de 8.000 las mujeres invitadas a la realización de estas pruebas de diagnóstico precoz en Ceuta, según los datos que maneja la Consejería. Solo hay un inconveniente: la cifra final de mujeres que finalmente se somete a la prueba fue de 1.321 mamografías en 2009. En 2010 se mantuvo aproximadamente igual, con un ligero descenso: 1.181 mamografías. La explicación a esta desarmonía entre avisos y pruebas de diagnóstico efectivas la aporta Sánchez:  “Muchas mujeres se realizan el estudio por su seguro o consulta privada. Otras no desean hacerlo por miedo o por mero desconocimiento. A otras no podemos acceder por no existir forma de contactar”.

Pedro Ballesteros trabaja en el área de Oncología del Hospital Universitario, donde dedica la totalidad de su tiempo a asistir a los pacientes de oncológicos. ¿Dónde estriba la importancia de la detección precoz del cáncer? En el bienestar de los pacientes. “Cuanto mas precoz sea el proceso menos agresivo será el tratamiento y mejores resultados en términos de curación. En un apartado meramente económico, cuanto más precoz se diagnostique un tumor más barato es tratarlo, menos tiempo quirúrgico requiere, menos días de hospitalización o menos empleo de tratamiento complementario necesitan”.

En Ceuta se diagnostica una media de 25 casos al año, señalaron las estadísticas de la Ciudad tras calibrar el promedio de los últimos lustros, un porcentaje que resulta similar al registrado en toda España. Los médicos insisten en la calidad de vida que proporciona a las pacientes el diagnóstico en sus primeros estadios. Por ello resulta fundamental campañas de sensibilización y visibilización como las desarrolladas hoy en muchas ciudades del mundo para conmemorar el Día Internacional del Cáncer de Mama, cuyo presupuesto consignado en Ceuta fue de 50.000 euros el año pasado.

Sánchez explicó que Ceuta fue pionera en bajar el límite de edad  mínima a los 45 años, “hace seis años”, anotó, umbral que ha ido  progresivamente extendiéndose al resto de comunidades autónomas. La edad máxima también es de las más altas. Y todo para conseguir detectar pronto la enfermedad. ¿Y si no  hay una detección precoz? Pillada tarde, “puede hacerse incurable”, aseguró Ballesteros, del Ingesa. “En esta situación intentamos que la paciente pueda vivir con una aceptable calidad de vida. No es importante solo un arsenal de fármacos, sino infraestructuras sociales que soporten todos los aspectos de la enfermedad”.

Una patología funesta en los países en vías de desarrollo
Siete de cada diez mujeres fallecidas a causa del cáncer de mama lo hicieron en países en desarrollo. Así lo señaló en una nota la Organización Mundial de la Salud (OMS), que la considera al mismo tiempo como una “enfermedad propia de países desarrollados”. La explicación a esta suerte de acertijo resulta de la lógica: si bien es más abundante el número de enfermas en los países llamados ricos, es en los países pobres donde más abundantes se produce la muerte, debido a la detección de la enfermedad en fases avanzadas. Por esa razón, la OMS no ceja de insistir en la importancia de la prevención. No obstante, aunque se trata de una forma de reducir el riesgo, la estrategia de detección precoz no puede eliminar la mayoría de los casos en los países de ingresos bajos y medios, en cuyas regiones se recomienda el conocimiento de los primeros síntomas y el cribado basado en la exploración clínica de las mamas.

Bajar las pruebas a los 25 años en el caso de mutaciones génicas
El Massachussets General Hospital ha publicado un estudio en el que muestra la eficacia de la detección aun más precoz en ciertos casos de cáncer de mama. El sometimiento a la prevención a los 25 años podría ayudar a vivir más a las mujeres que presentan una mutación genética vinculada a un mayor riesgo de padecer la enfermedad, informó en una nota la agencia Reuters, tras haber procedido el hospital estadounidense a pruebas a mujeres de 25, 30, 35 y 40 años. En concreto, se logró que las mujeres más jóvenes, de 25 años, pudieran vivir casi dos años más. Sin embargo, el estudio advirtió de que las pruebas citadas no son perfectas. Durante sus vidas, las mujeres que registraban la mutación génica y que comenzaron a realizarse mamografías desde los 25 años habrían obtenido varios falsos positivos que podrían sobrepasar los falsos positivos acumulados para otro género de portadoras de la enfermedad.

El 75% conserva el pecho
Tres de cada cuatro mujeres con un tumor en el pecho pueden beneficiarse de la cirugía conservadora, es decir, la destinada a mantener la mama. Por su parte, ocho de cada diez mujeres a las que se les practica la mastectomía se les practica una reconstrucción inmediata. Se trata de unos números aportados por la Unidad Funcional de Cáncer de Mama del hospital de Bellvitge (HUB), la más antigua de España, y reseñados por Europa Press. En el estudio se afirma además que al menos el 10% de “las pacientes se ven sin pecho en algún momento”, cifra que algunas organizaciones de pacientes lamentan que sea más alta en otros centros españoles. La supervivencia de la enfermedad se cuantifica en casi un 90%, números equiparables a otros países como Estados Unidos, Alemania, Suiza o Suecia. El hospital catalán, aseguraba la nota, prioriza la investigación para mejorar el tratamiento de sus pacientes en la línea de reducir la quimioterapia.

Unas 8.000 advertidas
Según señalan los datos de la Consejería de Sanidad y Consumo, en 2009 fueron realizadas 1.321 mamografías, siendo de 1.181 casos en 2010.
Programa de detección
Ciudad e Ingesa mantienen desde 2001 un convenio de colaboración en el Programa de Detección del Cáncer de Mama. Las mamografías deben hacerse cada dos años, recomendándose una periodicidad anual si existen antecedentes directos. Además de las comunicaciones realizadas desde la Ciudad, existen tres teléfonos a los la paciente puede llamar para solicitar una cita o información: 956519293 /   956510469 / 956511060.
Media de 25 casos al año
En los servicios médicos de Ceuta se detecta una media de 25 casos de cáncer de mama al año, según reflejan datos de la consejería. Las mujeres para las que están indicadas las pruebas de diagnóstico precoz se mantiene entre los 45 y los 69 años.