Claro esta, la china a la que me refiero, es la que de vez en cuando se nos cuela en el zapato y no nos deja ver el horizonte, pues para un buen senderista no hay peor enemigo, que la dichosa chinita, pues todos los sentidos al final acaban enfocadas a ella. Esto si podía ser una historia entre una china, los pies, y un zapato. Pero si observan - no tiene guasa este articulo- pues encierra más de lo que parece, de hecho si os dais cuenta todavía no he hablado del señor Vivas, pues parecer, que eso es tabú, así que yo a lo mío.
Por cierto, para luego seguir con lo de la china, saben ustedes que hay un presupuesto de 100.000 euros, para utilizarlo a las personas necesitadas, ahora la pregunta es, si parte de este irá a parar a alguno/as, con una 4x4 de 48.000 euros.
Pero volvamos a mi faceta de articulista de los pajaritos, arbolitos y todo aquello tan idílico a lo que con orgullo nos dedicamos lo que intentamos preservar un patrimonio, que como el natural, es de todos. Bueno para que los ciudadanos lo sepan también, unas de nuestras facetas esta en todo lo concerniente al medio ambiente urbano, como la recogida del aceites, pilas, bolsas o vidrio. Pues bien sin abandonar todo aquello que nos identifica, volvamos a lo de la china en el zapato, pues es cierto que los senderistas están haciendo historia, no solo, por el hecho de dejar constancia de que andar es una buena terapia, quizá mejor que muchos medicamentos existente en el mercado, por ejemplo si hablamos de enfermedades cardiovasculares, ya que no deja de ser cierto que cuando esa maquina llamada, ser humano, empieza a andar, utiliza todos sus componentes para poder llegar a un fin, de ahí que nuestra evolución siempre ha estado unida a las ansias de llegar mas allá de lo que nuestra vista alcanza ver en horizonte.
Bueno, como habrán podido observar, hoy he hablado poco o nada de los que nos gobiernan, seguro que hoy más de uno estará tranquilo, por el trabajo bien hecho, porque si alguien osa comparar la china a la que me refiero, con la otra que según dicen los economistas, que para el 2060, junto con la India y Malasia, será la primera potencia mundial sobrepasando a Estados Unidos, mejor no meterse con ellos por si acaso.