Una biblioteca para el futuro

En 1398 nació en Maguncia Johannes Gutemberg (su apellido verdadero era Gensfleisch). Nadie podía suponer que, cuando joven aún, diestro en el arte de fundición artística de metales preciosos, al regreso a su ciudad natal, tras unos años en Estrasburgo, trajera en su mente un proyecto que finalizaría con la invención de la imprenta. Es seguro que  el propio Gutemberg no imaginara la dimensión, transcendencia y alcance que su invento supondría para el futuro de la humanidad en los órdenes cultural, social y económico, fundamentalmente.
Ya en 1449,  imprime El misal de Constanza; en 1452 la primera edición de La Biblia, también denominada La Biblia de Gutemberg, en 42 líneas impresas y posteriormente, en 1453, El Salterio o Psalmorum Codex.
Gutemberg muere arruinado en su Maguncia natal el 3 de febrero de 1468. En el orden cultural y social la primera de las consecuencias de su invento traería el interés  por avanzar en la alfabetización de  las gentes y consecuentemente la expansión de la cultura en todas sus facetas y en el orden económico la transmisión de la palabra escrita a través de la industrialización y comercialización del libro.  
Sucesivamente, a través de los años, el desarrollo técnico industrial de la imprenta ha sido extraordinario, desarrollo que se ha venido ampliando,  progresivamente, conforme han ido apareciendo los nuevos medios de la comunicación  telemáticos.
A partir de los años 70 del pasado siglo, el escritor, empresario y filántropo Michel Hart, en su Illinois natal, inició un ambicioso proyecto denominado Proyecto Gutemberg a través del cual se realiza una intensa labor  de conversión de libros de dominio público en archivos de texto electrónicos que se pueden exhibir a través de cualquier ordenador. Hart era consciente de que estaba integrando en una red lo que posteriormente se convertiría en el hoy denominado Internet. Compendió y publico La Biblia y diversos textos clásicos. Al llegar a 1987 ya había dejado escritos en la red 313 libros.
Tradicionalmente por biblioteca pública se ha venido entendiendo el lugar o estancia donde se almacenaban sistemáticamente ordenados una colección de libros, con el fin de ofrecerlos, bien en un servicio de préstamos o bien para la  lectura in situ, en sala o salas adecuadas en el interior de la propia estancia a un determinado público.                                                            
Desde Hart en adelante el sentido tradicional de biblioteca se ha visto ampliado como consecuencia de la introducción de las nuevas tecnologías de la comunicación, que actúan  en todo tipo de relaciones humanas, aumentando las posibilidades de desarrollo intelectual individual y colectivo en las sociedades modernas, de tal modo que las oportunidades técnicas de los ciudadanos hoy para adquirir información son prácticamente ilimitadas.
En Ceuta a partir de los años 70, cuando la vida y el interés de la ciudad estaban principalmente centrados en una intensa actividad mercantil, se inicia un nuevo periodo de inquietud intelectual que se manifiesta en la creación de algunos centros de educación, recopilación y ordenación de documentos históricos, etcétera, y en su avance hasta hoy, hemos ido consiguiendo contar en la ciudad con un conjunto de bienes  de muy diversos órdenes: así, en el de ocio y deporte con bellísimo parque marítimo que completa carencias anteriores (escasez de playas y jardines), pabellones deportivos y otras muchas instalaciones para la práctica de jóvenes y mayores; en el histórico, con la restauración de unas murallas reales que son admiración de quienes nos visitan, así como la manifestación pública de muchos de nuestros documentos históricos; en el de la salud, con la construcción de un magnífico hospital universitario y otros centros para atenciones sociales; en el de la educación de unas instalaciones universitarias, de estudios de idiomas, etcétera, que se acogerán en un campus de excelente dimensión; en el urbano con una ampliación del ajardinado y peatonalización de calles, incorporación del puerto a la ciudad con unas instalaciones y un entorno difícil de encontrar en otras plazas portuarias, unido a unos servicios de limpieza y de restauración de edificios, etcétera, verdaderamente sorprendentes sobre todo cuando recordamos las condiciones y el aspecto urbano en que la ciudad recibía a sus visitantes entre los años setenta y finales de siglo.
En definitiva, hoy es Ceuta una ciudad presentable que nos enorgullece mostrar a quienes nos visitan. Pero no es el propósito de estas líneas realizar un inventario de algo que está a la vista de todos, sólo pretendemos destacar el equipamiento y orden urbano que se ha conseguido en nuestra ciudad en un reducido espacio de tiempo y dentro de todo ello destacar un nuevo acontecimiento cultural que muy pronto  estará a disposición del público: la Nueva Biblioteca Pública de la ciudad.
Se trata de un espléndido y bello edificio moderno cuya funcionalidad interior, iluminación externa e interna, amplitud, ubicación, etc. además de sus instalaciones, no sólo adecuadas a lo que una biblioteca tradicional debe disponer, incorporando, además, los más modernos elementos para la disposición telemática de textos y de otros medios audiovisuales, salas adecuadas para el estudio,  la investigación, para reuniones, conferencias, etcétera.
Se incorpora a la ciudad una instalación proyectada para el futuro, de imponderable valor cultural, para una ciudad que por su singularidad, tanto en su  natural aislamiento (hoy afortunadamente superado, en parte, por un eficiente servicio de transporte), como por su situación geopolítica, tiene que prever la expansión urbana lógica del crecimiento vegetativo de su población, así como en un futuro que ya comienza, estar estratégicamente preparada para integrar material y culturalmente a una población emigrante que se está incorporando a nuestra ciudad como, con carácter general, se está incorporando a todo el continente europeo.
En este último aspecto, me permito recomendar a quien pueda interesar, la lectura del Informe Eurostat Statisics in focus 23/2011: Populations and social conditions de Gianpaolo Lancieri (The greying of de baby boomers. A century long of ageing in Europe populations). O/y bien otro artículo mío aparecido en El Faro de Ceuta el día 2 de junio del año en curso: El envejecimiento de la población y el Estado del Bienestar.