La Guardia Civil ha detenido a un ciudadano británico de 75 años , de iniciales E.M., que viajaba a bordo del lujoso velero Arabian Moonshine, en el que se interceptaron 1.038 kilos de hachís, explicaron ayer fuentes del Instituto Armado, cuyos efectivos irrumpieron en mitad de una operación de trasvase de la mercancía entre una lancha de alta velocidad y la embarcación de recreo.
Fue una aeronave de la Guardia Civil que patrulla desde el aire la zona del Estrecho, en el marco de la Operación Indalo, la que se percató a mediodía de que se estaba produciendo un traspaso de fardos sospechosos entre las dos embarcaciones en alta mar, tras lo cual dio aviso a la base más próxima, en este caso la de Ceuta.
El Servicio Marítimo activó su patrullera, que consiguió alcanzar al velero, que fue trasladado a Ceuta a media tarde, aunque no así a la lancha, que se dió rápidamente a la fuga al percatarse de la presencia de la Guardia Civil en la zona.
La principal sospecha es que el velero se dirigía hacia algún puerto deportivo de la Costa del Sol, ya que que suele recalar con frecuencia en el de Estepona, donde está empadronado su patrón, que permanece en dependencias de la Comandancia en espera de ser puesto a disposición judicial.
1,6 millones de euros
Según ha explicado la Guardia Civil, los 1.038 kilos hubieran alcanzado un precio en el mercado negro de 1,6 millones de euros.
El objetivo principal de esta operación Indalo, que se realiza en coordinación con el FRONTEX y en la que participan otros países europeos, es la de coordinar sobre el terreno los métodos de actuación de los cuerpos policiales participantes en el dispositivo, para un control efectivo de las fronteras aéreas y marítimas del sureste peninsular, con el fin de evitar el tráfico ilegal de personas. También se han llevado a cabo acciones relativas a la lucha contra el narcotráfico, como en este cado, la contaminación marítima y el crimen transfronterizo.