La playa del Sarchal vuelve a ser protagonista una vez por la llegada de cuerpos extraños a sus orillas.
En esta ocasión se trata de parte de la batea que queda instalada en la bahía sur, frente al Recinto. Una de sus piezas, concretamente una viga con dos elementos flotantes unidos, lleva al menos dos semanas encallada en la zona rocosa a la espera de ser retirada.