Tras cortar la cinta y descubrir la placa en recuerdo de esta inauguración, autoridades, socios e invitados procedieron a la visita de las instalaciones. “En el local de Benítez teníamos solo cuatro aulas y aquí contamos con diez”, informó el secretario de Al Idrissi a los medios, “por esto la capacidad total será de unos 360 niños, jamás rebasando los 30 pequeños por aula”. Pero los fieles musulmanes no son los únicos que, como bien indicaron los responsables de Al Idrissi, son bien recibidos en el seno del centro cultural sino que “todo aquel que desee aprender árabe o hacer uso de lo que aquí ofrecemos tiene las puertas abiertas, profese la creencia que profese”.
Otra de las novedades que traerá esta nueva sede será una mayor flexibilidad horaria ya que no solo estará abierta en horario de tarde, cuando los niños pueblan sus aulas para aprender árabe, sino que por las mañanas también los adultos podrán asistir a diversas clases y cursos organizados por la asociación. A nadie le cabe duda de que esta nueva ubicación, en pleno centro de una barriada tan concurrida y bien conectada como la de Hadú, atraerá mayor número de usuarios. “Si abajo estábamos a tope, aquí las solicitudes todavía son mayores pues, aún sin haber abierto las puertas, ya hemos recibido más de 300 requerimientos”, informó Mohamed.
Tras la visita, encabezada por el presidente de Al Idrissi, Abdelkader Chaib, fue el vocal de Cultura y portavoz ante los medios, Abdelkader Hamed, el encargado de pronunciar unas palabras ante los presentes. Un discurso donde habló, ante todo, de respeto mutuo entre las culturas y aseguró que el fin último de la asociación Al Idrissi es “fomentar una mejor convivencia, así como dar a conocer nuestra cultura y la del resto de cuantas coexisten en la ciudad, favoreciendo el entendimiento mutuo”. Conferencias, cursos y clases “destinadas a toda la ciudadanía” serán el medio de transmisión. En esa misma línea Hamed aseguró que desde el centro cultural se pretende “desarrollar, contribuir y apoyar actuaciones socioeducativas que promuevan el desarrollo y la participación social de la sociedad ceutí en su conjunto”.
El acto de inauguración concluyó con una dedicatoria del presidente Vivas en el libro de honor de la asociación en la que hablaba de “convivencia en paz y armonía que, entre todos, debemos cultivar y cuidar”. Un paso muy importante para la asociación Al Idrissi que, todos están seguros, repercutirá positivamente en la sociedad caballa.