Ambos aceptaron los hechos que se les imputan, producidos en junio del pasado año en el puerto. El agente asumió una condena de 2 años de cárcel que quedó suspensa y 3 de inhabilitación; su compinche, una multa.
El tribunal de la Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta dictó ayer sentencia condenatoria in voce contra un agente de la Policía Nacional que fue detenido por sus propios compañeros en el puerto, tras vincularlo con un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. El agente Camilo J.J., que admitió todos los hechos, aceptó por conformidad una pena de 2 años de prisión y otros 3 de inhabilitación para el ejercicio de su profesión. La Sala acordó la suspensión de la condena carcelaria al carecer de antecedentes durante un periodo de 3 años, plazo en el que no podrá cometer delito alguno ya que se le revocaría dicha suspensión de inmediato. Aceptado el fallo, el agente, cuyos intereses fueron defendidos por el letrado Manuel Martínez Selva, fue puesto en libertad al término de la vista, dejando atrás un proceso judicial que ha venido marcado por una petición del Ministerio Fiscal mucho más elevada que la finalmente acordada, ya que en el escrito de calificación inicial solicitaba 7 años de prisión.
Junto al agente del CNP se sentó en el banquillo Musa A.M., defendido por el abogado Jorge Martín Amaya, quien aceptó una conformidad de 7 meses y 15 días de prisión sustituidos por el pago de 1.350 euros.
Con esta sentencia que ya es firme se cierra con sanción el operativo llevado a cabo en junio del año pasado por la UCRIF del Cuerpo Nacional de Policía, que investigaba la presencia de una posible trama en la captación de inmigrantes y embarque de éstos a la península a pesar de carecer de la documentación.
Fruto de esas investigaciones, el 30 de junio de 2015 se procedió a la detención en la estación marítima del agente de la Policía Nacional, que llevaba pocos meses destinado en el puerto, y a quien figuraba como su colaborador. Se pudo además comprobar el embarque de dos personas indocumentadas. Una, el 13 de junio a las 9.45 horas, cuando la llamada A.E.G. pudo embarcar a pesar de no portar la documentación. Llegó acompañada de Musa A.M. y ese día quien estaba de servicio en el control de documentación era el policía Camilo J.J. La joven habría pagado 400 euros por el pase.
El 30 de junio se repetiría el mismo plan, pero esta vez teniendo como protagonista a un varón, también indocumentado, llamado M.G., quien abonó 6.000 euros. Los roles volvieron a ser los mismos, con idénticos protagonistas: el agente en el puesto de control y su colaborador orientando la llegada del inmigrante a ese punto.
La UCRIF intervino poniendo el punto y final a una actitud delictiva que tenía como escenario el puerto.
En su escrito de calificación, el Ministerio Fiscal mantiene que ambos condenados se habían puesto de acuerdo y “guiados por el ánimo de procurarse un beneficio patrimonial ilícito” establecieron un plan para conseguir el traslado de inmigrantes de forma ilegal a la península. El policía nacional se aprovechaba de su trabajo en el filtro de pasajeros de la estación marítima, mientras que su colaborador se dedicaba a captar los inmigrantes que procederían a su embarque siempre en los turnos en los que el agente estaba de servicio. En todos los casos los inmigrantes carecían de la documentación para poder pasar el filtro del CNP. Hacerlo suponía que ese control debido y obligado no se había producido porque se estaba obviando a sabiendas el control y vigilancia necesarios. El dinero obtenido por cada pase era repartido entre ambos acusados.
La vista judicial señalada en la Audiencia estaba prevista para su celebración en la mañana de ayer, pero un acuerdo previo entre las partes evitó su celebración firmándose una conformidad que supone la plena aceptación de los hechos por parte de los dos acusados.
Musa A.M. ya se encontraba en libertad mientras que el agente del CNP, que permanecía preso preventivo durante casi un año, quedó ayer libre.
LOS HECHOS
30 junio 2015
Detención de los dos únicos acusados
Se produjo en plena estación marítima a la vista de todos los presentes. Los propios componentes del CNP que investigaban los hechos, adscritos a la UCRIF, desarrollaron el operativo deteniendo a las dos personas.
Dos pases
Confirmados y previo pago
En la calificación del Ministerio Fiscal se hace constar la existencia de al menos dos pases previo pago de 400 y 6.000 euros. En ambos casos los inmigrantes de origen marroquí carecían de documentación para poder embarcar a la península pero aún así consiguieron pasar el filtro.
Conformidad
De los hechos
Al objeto de evitar la celebración del juicio, se alcanzó un acuerdo previo entre las partes, que pasó porque los dos acusados reconocieran ante el tribunal su implicación en los delitos de tráfico de inmigrantes. Así lo reconoció tanto el policía, que seguía preso preventivo y quedó libre, como su colaborador, que ya se encontraba en libertad. A los dos, además de la condena en sí, se les ha impuesto el pago de la mitad de las costas procesales derivadas de este proceso iniciado.