Un joven marroquí, de 23 años, murió en la tarde de ayer tras sufrir un accidente en la playa de Beliones. Aunque el 061 lo trasladó de urgencia al Hospital Universitario, en donde falleció, tal y como confirmaron fuentes sanitarias. Los hechos se produjeron a primera hora de la tarde, cuando los agentes de la Guardia Civil destinados en el puesto de Benzú se vieron sorprendidos por la llegada de unos bañistas que trasladaban al joven en muy malas condiciones. La Benemérita, tras comprobar la gravedad del caso, dio aviso al 061 que, ya en el puesto, intentó reanimar al joven. Había pasado demasiado tiempo y las prácticas de reanimación eran prácticamente inviables. Aún así se consiguió el traslado al Hospital aún con vida, y fue allí en donde se produjo la muerte.
Según los datos facilitados, el joven era marroquí pero con residencia en Barcelona y se encontraría en Beliones de vacaciones. De acuerdo con los testimonios recogidos por la Benemérita, el fallecido, identificado como S.B., habría sufrido primero un fuerte traumatismo al arrojarse al agua y golpearse fuertemente con las rocas. Del traumatismo perdió el conocimiento. Los compañeros que se encontraban con él, al darse cuenta de la situación, acudieron a rescatarle sacándole del agua y trasladándolo al puesto que tiene el Instituto Armado. El 061 estuvo reanimándole cerca de media hora haciéndole reaccionar durante unos minutos.