Su paseo habitual mañanero por las inmediaciones del Poblado Marinero se convirtió, ayer, en una pesadilla para el ceutí Amar M.H., de 61 años, y residente en la calle Patio Castillo. Tal y como ha narrado en la denuncia que ayer mismo presentó en la Jefatura Superior, Amar fue abordado, pasadas las doce del mediodía, por un vehículo policial que se detuvo a su lado. Los dos funcionarios, al “grito de dónde está el dinero”, dice, comenzaron a “agredirle” hasta introducirlo en el zeta policial. La víctima mantiene que le habían confundido con un ladrón que poco antes había robado en una tienda de las cercanías del Mercado Central. Al verle pasear por el Poblado (acción que lleva a cabo de forma casi diaria), le detuvieron.
Ya en el interior del coche, el hombre fue trasladado hasta las cercanías del Mercado, en donde, dice en la denuncia, “se aproximaron a donde estaba una señora, que les dijo a los policías que yo no era”. Esa mujer era la víctima del robo y la que había alertado al Cuerpo policial para advertirle de lo ocurrido. Lo que pasó es que quien había sido introducido en el coche no era el ladrón sino un hombre, ya con varios años encima, que nada tenía que ver con hechos delictivos. Después de toparse con la negativa de la mujer, la víctima denuncia que fue sacado del coche por la fuerza, abandonándolo en el lugar de los hechos. El denunciante tuvo que ser atendido en el Hospital de una cervicalgia y dolores en las articulaciones, colocándosele un collarín. Ayer tarde, acompañado de su hijo, lamentaba lo sucedido y señalaba, y así lo ha hecho constar en su denuncia, que puede reconocer a los agentes aunque estos no quisieron dar su número de identificación.
‘El Faro’ quiso obtener ayer la versión de la Policía Local, pero su Jefatura no la aportó.