Un día antes

No voy a insultar a nadie pero no me faltan ganas. Desde el encierro obligado al que me veo sometido, como toda España, y que llevo con resignación y con un cierto temor, no me cabe duda de que los responsables de este atropello a nuestros ciudadanos, a nuestros hermanos, siguen en esa penumbra que les ofrece esa ineptitud propia de insensatos y proclives al desorden colectivo. Ellos son los culpables de esta riada de polvo y ruina, de descalabro general, de enfermos y de muertos que caen por culpa de la ineptitud de un gobierno sin rumbo, falto de precaución, roto por el desprecio que genera no tener conocimiento de la realidad. Y no será porque no se les avisó, no será porque Europa clamó por tomar medidas preventivas, viendo que Italia se moría a cada instante, día a día… llevamos ocho días viéndolas venir y sin saber aquellos que mueren o se salvan. Si, muere el Marqués de Griñón y se sabe, muere Lorenzo Sanz y el sentimiento aflora, aquel que nos dio a los madridistas dos Champions, ligas y Copa Intercontinental. Pero no es morir lo mas importante, ¡no!, es la forma de morir, solos, desamparados, sin tener a sus familiares cerca de ellos, velando sus cuerpos, heridos en lo mas íntimo. No hay derecho y alguien tendrá que pagar tanto dolor. Dicen que las manifestaciones del 8-M fue el motivo principal por lo que esta algarabía no fue suspendida y que ha generado multitud de positivos, todo por esa influencia que ahora estamos pagando. Es cierto que Vistalegre también trajo consigo muchas infecciones pero, este fatídico gobierno, la podía haber suspendido y no hubiese habido concentración. Los que somos de VOX sabemos obedecer y cumplir con las normas que se establezcan para conseguir con ello el bien común.

Al parecer, Europa ordena que las caravanas de extranjeros procedentes de Marruecos con destino a sus países, pasando por el puerto de Ceuta, se hagan efectivas. ¿No se habían cerrado todas las fronteras?... Es curioso, en esto si atendemos a lo que dice la perdida unión europea (en minúscula) pero no consideramos oportuno aplazar las manifestaciones, sobre todo la de mujeres y que fueran suspendidas. Ya estamos cansados de las políticas podridas de un país que no sabe financiarse y que necesita nuestro dinero para sobrevivir. Es deprimente que el norte de ese país tercermundista esté sumergido en la pobreza, salvo raras excepciones. En Ceuta se han debido abrir polideportivos para acoger a musulmanes y argelinos MENAS y otros residentes marroquíes que no pueden acceder a sus casas. Estas pobres familias se encuentran acogidas en hostales y naves porque Marruecos no los deja pasar a sus casas en el país vecino. Por otra parte el consulado marroquí en Algeciras no atendió a otros viajeros de origen marroquí y que, muchos de ellos, debieron de hacer un viaje de regreso a la venerada Italia. Es el trato que reciben estos súbditos marroquíes por su propio país (si, en minúscula), no se merecen otro significación.

Es demencial que en Cataluña, y en el interior de sus prisiones, se estén confeccionando mascarillas y guantes que, con su poca vergüenza, envían a Italia. Los dirigentes catalanes no quieren a España pero piden dinero al gobierno español (en minúscula), no vaya a ser que no les apoyen en sus ennegrecidas peticiones. Es una ditonía propia de la maldad del separatista, del golpista arropiero, del gobierno de la estrechez mental.

Si termina la infección del virus, este gobierno (en minúscula), será obligado a rendir cuentas en el Congreso y a los ciudadanos porque su política errática ha quitado la vida a personas con unas ilusiones y, principalmente, con una familia.

VOX apoya la verdad y el sentido común y llegará el día que, con su claridad a flor de piel, proponga medidas condenatorias contra estos responsables… Por todo ello, Viva VOX por siempre y para siempre, Viva Vox porque lucha por nuestra Patria, Viva VOX porque defiende a España, lo Español, su Semana Santa y sus Reyes Magos, sus vinos de Jerez y su Feria de Sevilla. Porque VOX es Español y nos defiende siempre… Arriba España, Viva el Rey y viva la rojigualda.