Un detenido en otro golpe al radicalismo

La Comisaría General de Información coordinó el operativo que comenzó de madrugada y terminó con el traslado del único arrestado en Ceuta en helicóptero hasta Madrid. Hubo registros en Los Rosales y en el negocio hostelero que había montado en Hadú.

Agentes de la Policía Nacional coordinaron la pasada madrugada una amplia operación desarrollada en distintos puntos del país que, de momento, se ha saldado con el arresto de siete personas. Alicante, Valencia y también Ceuta han sido los escenarios en donde se movilizó a cientos de agentes del CNP para lograr la detención de quienes, según las investigaciones gestadas desde hace meses, podrían tener relación con organizaciones terroristas como Jabhat al Nusra e ISIS.
En el caso de Ceuta, el dispositivo se activó en torno a las 4.00 horas, tomando como escenario las barriadas de Los Rosales, La Reina y Hadú. Coordinados por la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, agentes de varias unidades ejecutaron entradas con orden judicial en la vivienda de un ciudadano sirio, afincado hace poco tiempo en la ciudad. Se registró su casa, ubicada en Los Rosales y, posteriormente y en su presencia, se procedió a hacer lo mismo en un negocio que había montado en Hadú, frente al Mercado, llamado El sirio rey del shawarma y kebab.
Llovía intensamente en una madrugada en la que Ceuta asomaba como una ciudad fantasma, con buena parte de su población dormida y la otra, aún con la resaca de la celebración del Concurso de Agrupaciones de Carnaval. Un momento idóneo para trabajar sin obstáculos, sin problemas que pudieran ralentizar el dispositivo policial.
Esposado, tapado con un pañuelo tipo palestino que ocultaba completamente su rostro, los agentes del CNP procedieron a sacar al detenido de su vivienda, situada en el interior de la barriada, para introducirlo en el negocio que había montado para proceder al registro del local en su presencia y grabando todos los movimientos llevados a cabo. Eran las 9.00 horas cuando, tras haberse acordonado la zona previamente, el detenido era introducido en su propio negocio. Agentes de la UPR blindaban todos los posibles accesos al lugar, evitando el tránsito de vehículos así como el acercamiento de los curiosos, que ya a esas horas iban en aumento. Efectivos de otras unidades también colaboraban, estando al frente agentes de la Comisaría General de Información de Madrid pero también de la Unidad en Ceuta, cuyo trabajo, por eficaz, está dando múltiples frutos en este ámbito delincuencial.
Al detenido se le vincula, presuntamente, con la financiación de estos grupos radicales. Lo mismo pesa sobre el resto de interceptados en otras provincias. Tal y como corroboró ayer el Ministerio de Interior, cuatro de los arrestados son de nacionalidad española y orígenes sirio, jordano y marroquí, mientras que otros dos, residentes en España, son de nacionalidades siria y marroquí. No se ha precisado la nacionalidad del séptimo.
Interior sí ha concretado que la investigación policial, que comenzó en 2014, ha permitido el desmantelamiento de una célula cuyos miembros se integran en la estructura exterior de las organizaciones terroristas de carácter yihadista ubicadas en la zona sirio-iraquí, Jabhat al Nusra (JaN), e ISIS, mediante el suministro de material logístico imprescindible para el sostenimiento de sus actividades terroristas.
La operación se ha desarrollado bajo la dirección del titular del Juzgado Central de Instrucción número seis de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, y en coordinación con la Fiscalía de la Audiencia Nacional. Pasadas las doce del mediodía, y bajo importantes medidas de seguridad, el detenido fue trasladado al Helipuerto civil para, en un helicóptero del CNP, proceder a su traslado a Madrid para que en las próximas horas sea puesto a disposición de la Audiencia Nacional.
Con estas nuevas detenciones, el número de personas arrestadas en España en 2015 y 2016 vinculadas a este tipo de terrorismo se eleva a 82, según datos del Ministerio del Interior.

¿Y en este caso?, ¿qué es lo que dice el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz? Ayer habló en una comparecencia de prensa ofrecida en Barcelona y lo hizo para referirse al modus operandi que seguían los siete detenidos, así como ofrecer más luz sobre el papel que presuntamente desempeñaban fruto de su integración en la estructura exterior de Jabhat al Nusra y Estado Islámico.
En declaraciones ante los medios de comunicación en Barcelona, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, aseguró que los detenidos estaban muy organizados e incluso su líder, presuntamente, tenía muchos contactos con los responsables de los grupos terrtoristas Jabhat al Nusra y Daesh. Tras destacar que existe secreto de las actuaciones judiciales ordenadas por la Audiencia Nacional, el ministro explicó que el grupo yihadista desarticulado enviaba, como si fuera ayuda humanitaria, material militar, dinero, equipos electrónicos y de transmisiones, armas y material para fabricar explosivos que se utilizaban en los conflictos de Siria e Irak, donde eran muy activos. Estos envíos iban en contenedores, camuflados de ayuda humanitaria, que salían de puertos españoles.
Los siete detenidos también se dedicaban, presuntamente, al blanqueo de capitales y a la financiación de estos grupos terroristas. Para ello tenían un “complejo empresarial” que permitía enviar el material sin levantar sospechas. Además, se le pedía al líder de la organización que buscase mujeres para enviar Siria e Irak para que se casasen con yihadistas. Es en este papel de financiación en el que se incluiría al detenido en la ciudad autónoma. El grupo era “muy activo en las redes sociales”, según Fernández Díaz, quien destacó la actuación de las fuerzas de seguridad del Estado en el marco de la lucha antiterrorista ya que se ha producido “un salto cualitativo importante” al ampliar el radio de acción no sólo contra los sospechosos organizados sino que también van contra la financiación y captación de los terroristas.  Operaciones de este tipo ayudan a mejorar esa denominada seguridad subjetiva toda vez que se está viendo la práctica continuada de arrestos.
El funcionamiento y la dirección del grupo la ejercía un solo miembro, que había establecido un liderazgo permanente basado en la confianza, en intereses compartidos y en un ideario radical afín. Este líder centralizaba y dirigía toda la actividad a través de un complejo empresarial que le permitía, sin levantar sospechas, el envío del referido material en contenedores cerrados, que tenían su punto de partida en puertos españoles y cuyo destino eran los grupos terroristas que operan en Siria e Irak.
La presión militar que se está ejerciendo en la zona de conflicto sobre las organizaciones terroristas las ha obligado incrementar sus necesidades de abastecimiento, no solo de combatientes, sino también de suministros tecnológicos, armamento y equipamiento militar. Interior destaca que la red desmantelada tenía como cometido principal cubrir estas necesidades. “Lo hacía de forma eficaz, logrando la plena satisfacción de estas organizaciones y por consiguiente el incremento de pedidos de mercancía más especializada. Estos suministros continuados, por parte del grupo delictivo desarticulado, favorecía directamente la continuidad y el reforzamiento de las estructuras terroristas en Siria e Irak”, reseña.
La cobertura fraudulenta que utilizaban para estas remesas era la de  envío de ayudas humanitarias a las zonas de conflicto, pero realmente lo que viajaba oculto entre enseres varios era material militar, dinero, equipos electrónicos y de transmisiones, armas de fuego y precursores destinados a la fabricación de explosivos.
La financiación necesaria para la preparación de todas estas remesas de mercancías a Siria e Irak, proviene principalmente de envíos a través de compañías de transferencias internacionales de dinero, utilizando a personas interpuestas, y sobre todo, por medio de pagos y movimientos de dinero al margen del sistema legal, mediante el método conocido como Hawala, con el que los investigados eludían el control de las autoridades.
Paralelamente a las labores empresariales ilegales, el líder de la red mantenía constantes y fluidas relaciones con un integrante de la organización terrorista Daesh, quien le solicitó en varias ocasiones que captase a mujeres para que se desplazasen a Siria, con el fin de que se casasen con los yihadistas que combaten bajo su bandera, siguiendo las directrices establecidas por su líder, Abu Bakr al-Baghdadi.{galerias local="20160207_operacion" titulo="La operación en imágenes"/}