Fue el último risky de Ilias. Después de ese segundo intento por colarse en un camión en el puerto de Ceuta, este menor de Martil (Marruecos) moría atropellado de forma accidental por un camión. Su cabeza y su pecho destrozados hacían imposible cualquier recuperación. Ilias murió al momento. Su madre, horas después, reconocía el cuerpo y presentaba su pasaporte en la Comandancia de la Guardia Civil. En el documento pone que tenía 14 años, su fotografía se asemeja al de un niño de 11 ó 12. Ilias ya no volverá a intentar ocultarse entre la chatarra, como hizo ese jueves, ni a meterse debajo de algún vehículo. Eso le quitó la vida después de que se le hubiera ayudado a salir de la calle. Ese jueves 14 de febrero fue el último risky de Ilias, pero no el de sus amigos. Ayer viernes, a la misma hora en la que se producía el accidente y en el mismo lugar, los amigos y compañeros de este chico reproducían sus pasos. Carreras detrás de camiones, búsqueda de huecos para colarse en sus bajos, en las cargas o en las bateas... y vigilancia por si aparecía la Guardia Civil o la Policía Portuaria. El puerto, 24 horas después de la tragedia, sigue igual. Hay la misma falta de efectivos, la misma presión y los intentos de escapada se repiten. Los mismos menores y adultos que lloraban la muerte de Ilias y hablaban con FAROTV sobre la situación en el puerto, volvían a perseguir vehículos y buscaban la manera de burlar la vigilancia de las fuerzas de seguridad. Las lágrimas ya se han borrado de sus caras. La muerte ha dejado paso, demasiado rápido, al riesgo.