Esta es la historia de tres
menores marroquíes, unos más de los etiquetados como
menas o, ahora, niños solos. Tres chavales que convirtieron Ceuta en su ciudad de paso insistiendo a diario en su intento por cruzar al otro lado. Buscaron colarse en los camiones, quisieron meterse en las atracciones de la Feria e incluso intentaron cruzar el Estrecho a bordo de una embarcación impulsada a la antigua, a remos. Todo con tal de dejar atrás la Ceuta a la que llegaron
bordeando la frontera y en la que no han querido ingresar en los recursos municipales de acogida dispensados por la Ciudad Autónoma.
Hoy tres de esos niños han llegado a
Algeciras. Pero lo han hecho después de permanecer tres días escondidos en el buque 'Festivo', que lleva a cabo transporte de bateas pero también se encarga de traslados de la basura, chatarra o neumáticos. Los tres niños, que llevan tiempo merodeando la zona portuaria e intentando meterse en alguno de los buques, pudieron llegar al ‘Festivo’ el pasado viernes pensando que iba a cubrir la ruta con Algeciras. Pero se equivocaron y es aquí donde comenzó una historia que ha durado tres largas jornadas.
Este buque tiene su base en Málaga, a cuyo puerto llegó para dejar bateas vacías y llevarlas con carga a Algeciras. Los niños debieron pensar que en vez de llegar a dicho puerto se encontraban en
Melilla. Y no era un pensamiento errático, pues otros inmigrantes como ellos han terminado en la ciudad hermana por error. Fue por eso por lo que decidieron permanecer escondidos, trasteando entre la basura que había para alimentarse durante todo el fin de semana y el puente de la Virgen. Este martes, cuando el buque ha atracado en Algeciras, es cuando los tres menores han sido encontrados y entregados a la
Policía Nacional. Ahora se iniciarán los protocolos oportunos para su atención. Llenos de grasa y suciedad, así han sido encontrados y desembarcados en la localidad gaditana.