Han pasado cinco días desde la jornada donde Javier Guerrero estuvo a punto de presentar la dimisión como consejero de Sanidad y diputado de la Asamblea, pero al final distintas presiones hicieron que el jefe del Ejecutivo se replanteara esta salida y se dio por finiquitada la crisis. Sin embargo, muchos apuntaban a que la herida estaba todavía abierta y que no sería nada extraño que nuevamente se volviera a presentar esta situación en la mesa del Consejo de Gobierno.
Y no ha tardado mucho. En la reunión que tuvo lugar, en la mañana de ayer, para la preparación de las sesiones plenarias de esta semana de lo que menos se habló fue de los asuntos que se abordaran, sino de la presión que estaba soportando el Gobierno en su conjunto y, por ende, la misma ciudad de Ceuta.
El mismo presidente Vivas se lo planteó esta mañana al consejero de Sanidad, Javier Guerrero y repasaron no solamente las noticias que se están sucediendo en los distintos medios de comunicación nacionales donde Ceuta no está quedando nada bien, sino también desde la misma cúpula del Partido Popular, donde la semana pasada ya dejaron claro su pensar, pero donde horas después le transmitieron a Vivas su sentir diciendo que la competencia para llevar a cabo el cese o invitarle a dimitir le correspondía al propio jefe del Ejecutivo. Un cambio de estrategia después de que el mismo Guerrero llamara a otra compañera de profesión, la antigua presidenta del Congreso de los Diputados y exministra de Sanidad, Ana Pastor, todavía un peso pesado en la ejecutiva de Casado, que abogó por la continuidad de Javier Guerrero.
Una vez que se repasó en esa reunión toda la situación de presión que se está viviendo se dirigió a Javier Guerrero y le dijo que todo era insoportable y que Ceuta estaba siendo perjudicada. Le señaló que en su mano estaba el dimitir o no y que hiciera lo que creyera en conciencia. La respuesta de Guerrero fue que iba a redactar la carta donde presentaría la dimisión como consejero de Sanidad y como diputado del PP en la Asamblea.
Además, se da también las circunstancia de que Vivas antes de la reunión con su grupo parlamentario tuvo un encuentro con dirigentes socialistas donde estaba el secretario general del partido en nuestra ciudad y portavoz en la Asamblea, Manuel Hernández, donde no solamente se hablaría de la comisión de investigación que se había pedido y que apoyaba el mismo Vivas, sino que seguramente le pidieron que presionara a Guerrero para que se marchara.
Por otro lado, distintos medios de comunicación peninsulares están investigando en estos momentos no solamente las circunstancias derivadas de la vacunación de Guerrero, sino también su petición de compatibilidad el año pasado, siendo ya consejero, para ejercer la medicina privada en dos clínicas de nuestra ciudad o el escándalo hace unos meses por la comprar de material sanitario.