Tragsa prevé probar a mediados de este mes un nuevo sistema con un dron terrestre para cribar, limpiar, desmenuzar, airear, desinfectar y quitar hasta el 80% del polvo de la arena de las
playas con más afluencia de Ceuta, como las de La Ribera, El Chorrillo o Benítez.
El objetivo de la actuación encargada por la Consejería de Fomento,
Medio Ambiente y Servicios Urbanos es tener el litoral de la ciudad en las mejores condiciones de uso posibles
para la temporada de baño que comienza oficialmente en junio.
Después de las polémicas de años anteriores, Tragsa ha diseñado “un sistema de
cribado del polvo contenido en la arena de algunas playas de Ceuta que será acoplable a un dron comercial”.
La empresa pública ya ha creado un boceto en tres dimensiones orientativo con la solución de cribado propuesta que incluye el sistema de aspiración. En la fase de ingeniería de detalle, tras la visita, se procederá “al dimensionado optimo y a la incorporación del resto de componentes”.
Actualmente existen en el mercado vehículos no tripulados con sistemas de cribado de arena que están destinados a la eliminación de cuerpos de tamaño pequeño como piedras u hojas y basura como colillas o plásticos.
En las playas locales no se trata de cribar y devolver el cuerpo pequeño (arena) y almacenar para su retirada el mayor (piedras), sino de “cribar y almacenar el polvo y devolver la arena”.
Tragsa ha propuesto utilizar un sistema de rastrillos para desapelmazar y levantar la arena y una criba mecánica vibratoria con un tamaño de tamiz acorde con la granulometría del polvo a separar. A partir de ahí entraría en acción un sistema de aspiración con filtro del polvo, que irá a un depósito de almacenamiento del capturado. Opcionalmente se podría complementar incluso con un equipo para acelerar el proceso de desinfección de la arena frente a virus, bacterias y hongos.
Según los técnicos que han hecho la propuesta “una vez cribada la arena y devuelta a la playa limpia, desmenuzada y aireada, los propios rayos solares se encargan de manera natural de desinfectarla, pero para acelerar este proceso se puede incorporarse un sistema de luz ultravioleta (UV), ya que esta proporciona una inactivación rápida y eficiente de los microorganismos mediante un proceso físico”.
Al exponer bacterias, virus y protozoos a las longitudes de onda germicidas de la luz UV, estos se vuelven incapaces de reproducirse e infectar. Otros sistemas aprovechan para destruir contaminantes químicos como pesticidas, disolventes industriales y fármacos, a través de oxidación.