El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, donde residen las competencias de Inmigración dentro de la Secretaría de Estado de Migraciones, ya se ha cansado de los incumplimientos realizados por parte de la empresa Dulcinea Nutrición, adjudicataria del servicio de catering del CETI de Ceuta.
Según fuentes del propio Ministerio consultadas por esta redacción la Ley de contratos establece mecanismos para la resolución del expediente y manifiestan que podría iniciarse en cualquier momento para que la empresa radicada en Puertollano dejara de prestar sus servicio en el Centro de Estancia Temporal para Inmigrantes de nuestra ciudad. Y las razones de que se podría resolver el contrato es porque la Abogacía del Estado, que lleva varias semanas analizando la problemática sucedida, ve claros incumplimientos esenciales como la falta de stock suficiente o la falta de mantenimiento de las instalaciones.
Estas mismas fuentes ministeriales han confirmado a nuestra redacción que ante la falta de abastecimiento se está garantizando el suministro desde el propio CETI. Sin embargo, se ha dado la circunstancia de que han requerido a la empresa de manera urgente para que proceda al cumplimiento del contrato, especificándoles los incumplimientos, pero no han respondido a estos requerimientos.
De todas maneras, no tiene nada de extraño que no respondan ni siquiera a los requerimientos del Ministerio, porque los trabajadores que llevan meses con problemas de cobro de sus sueldos no encuentran tampoco ningún interlocutor en la empresa porque no se les pone al teléfono.
Hay que destacar que como publicamos en nuestra edición del pasado lunes, ante el aviso por parte del personal de Dulcinea Nutrición de la falta de alimentos en el CETI para la preparación de la comida durante el fin de semana no hubo más remedio que habilitar un partida para poder hacer frente y así se seguirá hasta que haya otras novedades porque lo que sí han podido comprobar que Dulcinea Nutrición ya hace caso omiso a cualquier advertencia que se les haga.
Hay que recordar que la misma delegada del Gobierno manifestó el pasado mes de julio que la Secretaría de Migraciones ya había advertido a Dulcinea Nutrición de que se podría comenzar un expediente de rescisión de la adjudicación que se les hizo en su día y, por lo visto, han hecho caso omiso a estas advertencias que ya comenzaron a efectuarse hace dos meses aproximadamente. No hay ningún modo de encontrar un interlocutor en el adjudicatario.
Desconvocan la huelga
La rescisión del contrato de Dulcinea es inminente, “cuestión de días” según fuentes sindicales, quienes junto a la plantilla han decidido desconvocar la huelga planificada para mañana jueves ya que “el objetivo de echar a la empresa ya está iniciado”. Los empleados del servicio de comidas han decidido “emprender otra vía” para reclamar los retrasos en sus nóminas que todavía no han cobrado 17 personas. De esta manera, se van a concentrar a las puertas de la Delegación del gobierno mañana a las 12.00 horas a fin de exigir que se regularice su situación. “Ya sea a través del embargo de la empresa o con el dinero retenido los trabajadores tienen que cobrar sí o sí”, ha zanjado Ramón Sánchez, de UGT Ceuta.
Por su parte, la empresa sigue sin dar señales de vida. La Administración está asumiendo el coste de los víveres que el Centro de Estancia Temporal de Inmigración precisa para alimentar a los 650 usuarios desde el pasado jueves. Y la gerencia de Dulcinea ni siquiera se ha pronunciado al respecto. Los trámites del expediente están en manos de la abogacía del Estado, cuyo objetivo es apartar a Dulcinea Nutrición e iniciar el siguiente proceso de licitación para que sea otra empresa quien asuma el control.
Siguen sin cobrar los trabajadores de la empresa
Pero si hay problemas en cuanto al stock de los alimentos y el mantenimiento de las instalaciones no está la situación nada boyante tampoco con el personal que presta sus servicios en las cocinas del Centro de Estancia Temporal para Inmigrantes. Desde hace varios meses vienen cobrando con retrasos sus nóminas al igual que la paga extraordinaria de julio. En la actual solamente una parte pequeña del colectivo de trabajadores ha recibido la paga de agosto pero aún quedan otros diecisiete por percibirla. De ahí su decisión de ir a la huelga porque no les queda otra salida.