El prestigioso diario británico The Telegraph elogia en sus páginas la capacidad de resistencia en tiempos difíciles de Marruecos, "al reaccionar con determinación y serenidad inquebrantable tras el seísmo que sacudió el Reino".
"Me sorprendió la notable capacidad de Marruecos para responder con rapidez y eficacia cuando se enfrenta a tales desafíos", escribe el autor del artículo, James Duddridge, ex ministro británico de Comercio Internacional y ex ministro encargado de asuntos africanos.
"Las medidas de emergencia en Marruecos se tomaron inmediatamente después del terremoto e incluyeron la intervención de las Fuerzas Armadas Reales, las autoridades locales, los servicios de seguridad y los departamentos concernidos", afirma Duddridge.
"En 48 horas, Marruecos ha reabierto parcialmente una carretera vital hacia la zona del seísmo, creando una línea de vida para la ayuda a las regiones más afectadas", explica el actual miembro de la Cámara de los Comunes, señalando que los helicópteros militares no han dejado de participar en las operaciones de rescate y socorro, mientras que los marroquíes se han movilizado en una notable muestra de solidaridad popular para ayudar a los necesitados.
Estas rápidas medidas de socorro no fueron más que el principio, observó The Telegraph, señalando que a los tres días del seísmo, el gobierno marroquí creó un Fondo Nacional de Solidaridad y se dieron directivas reales, que incluyen medidas destinadas no sólo a la reconstrucción, sino también a la transformación y mejora completas de las zonas afectadas, preservando al mismo tiempo la cultura y el patrimonio locales.
El compromiso del país con el progreso y el avance se pondrá de manifiesto cuando Marrakech acoja el mes que viene las reuniones anuales del Banco Mundial y el FMI, informa The Telegraph, asegurando que los visitantes y turistas "son tan bien recibidos en Marruecos como siempre".
Una desgracia que por el momento se ha cobrado alrededor de 3.000 vidas y ha dejado a otras 5.000 personas heridas.