Dice que la ley le ayudará a "poner a cada uno en su sitio"
El Comité Territorial del Sindicato Unificado de Policía (SUP) quiere expresar su preocupación y malestar por los "continuos vaivenes" que se vienen produciendo en lo relativo a la organización y funcionamiento de los operativos destinados a la organización del paso de porteadores por el puesto fronterizo del Tarajal, "y que dan como resultado las numerosas quejas ciudadanas así como la sensación de una improvisación institucional inadmisible, partiendo de la base en la cual somos conscientes de que no todo es solucionable por parte de nuestras autoridades, ya que es perfectamente entendible que la colaboración del país vecino se hace indispensable para la fluidez y buen funcionamiento del citado paso fronterizo". No obstante, el sindicato dice que "sin duda hay cuestiones que son de responsabilidad exclusiva de nuestros gobernantes, representados en nuestra ciudad por nuestro delegado del Gobierno, el cual nos consta no cesa en su empeño de intentar solucionar el asunto en reuniones con los distintos responsables de las fuerzas y cuerpos de seguridad, en un intento que hasta la fecha se ha mostrado infructuoso de poner orden y concierto en las funciones y trabajos que cada uno debe de llevar a cabo para la ordenación y gestión del citado paso, como si no estuvieran claramente especificadas funciones de cada uno en una norma de obligado cumplimiento como es la Ley de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, la cual debería ser considerada el catecismo de todo aquel que pretende dirigir a las citadas instituciones". Por este motivo, el SUP le insta "a que dedique un rato a su lectura de esta norma de rango superior, lo cual le repondrá rápidamente la sabiduría y conocimientos necesarios para poder disponer quién y cómo debe realizar cada una de las tareas necesarias para que todo funcione de forma adecuada". El sindicato añade que "la organización de un asunto de esta trascendencia y repercusión no se puede tratar como si de un reparto de cartas en una partida de mus se tratase, y en el que los más listos pretenden no coger las cartas que les corresponden, aun siendo plenamente conscientes de que estas están asignadas por ley". Por todo ello, ruega al delegado del Gobierno "que dedique unos minutos a leer la citada Ley, la cual le va a proporcionar la clarividencia necesaria para poner a cada uno en su sitio".