El Sindicato Unificado de la Policía Nacional en Ceuta (
SUP) ha lanzado un mensaje de apoyo a los agentes heridos en la
barriada del Príncipe en la noche del pasado viernes, cuando se produjo una auténtica batalla campal.
Siete componentes del Cuerpo, integrantes de la UIP y de Udyco, terminaron lesionados. Los más graves por traumatismo en la cabeza y por daños en una vértebra. Esos fueron los daños físicos pero también pesan los que han afectado al Cuerpo a nivel moral tras una de las peores incursiones en la barriada que terminó como no se esperaba. El SUP ha respaldado a los policías apuntando a lo complicado de este tipo de situaciones en donde muchos son los que se apoyan en la masa de personas para atentar contra la
Policía. Confía en que, tras la detención de los que participaron en esta batalla campal, se produzca una contundente respuesta judicial.
Algo más que piedras contra la Policía
En la noche del viernes se había dispuesto un operativo para detener a una persona, una de tantas que permanecen en busca y captura porque deben responder a procedimientos judiciales en su contra. La UIP daba cobertura de seguridad a la Udyco. Los altercados se produjeron en el zoco, arrojándose desde una parte superior piedras pero también elementos de mayor envergadura procedentes de una obra cercana y un muro destrozado tipo ladrillos. La violencia de esos objetos causó tanto daños físicos entre los agentes pero también materiales. La Policía pudo detener a una persona y abandonó la barriada acudiendo varias unidades al hospital. Horas después, ya de madrugada, volvieron al barrio. Desde el SUP de hace hincapié en las situaciones complicadas que se viven recordando episodios en los que han arrojado no solo piedras a los agentes sino también menaje del hogar o han puesto a niños por delante. Son situaciones complejas que terminan generando daños. El sindicato traslada su máximo respaldo y apoyo por unos hechos que han obtenido una cadena de condenas desde distintos ámbitos.
Sucesos posteriores, no todo es igual
A los sucesos en la barriada se sumaron otros posteriores como la quema de contenedores en el entorno de la barriada.
También se produjo la de los vestuarios que sirven para empleo en los campos de fútbol ubicados bajo el puente quemadero. En este caso esa quema no tiene que ver con la escalada de violencia suscitada prácticamente a diario, sino con un asunto de venganzas que está sometido a investigación policial. Se trataría de un daño dirigido contra determinadas personas que ha terminado teniendo estos graves daños colaterales hasta poner en riesgo la continuidad de la escuela de fútbol.