La niña de 13 años recibió una caída en el parque acuático de la Ribera pese a que el socorrista le advirtió de forma reiterada
En torno a las 15.00 horas de ayer una niña de 13 años que disfrutaba junto a otras amigas en el parque acuático instalado en la playa de la Ribera recibió la caída de una de ellas mientras esperaba su turno para subir en la atracción hinchable con forma de pirámide. La menor fue atendida por el socorrista de la empresa, que se situaba en la parte más alta del hinchable, quien rápidamente le abrió las vías respiratorias y avisó al equipo de Marsave, con quienes se encuentran en coordinación, para trasladarla hasta la arena.
Los dispositivos de Marsave intervinieron en moto de agua para trasladar a la menor hasta la orilla donde fue inmovilizada y trasladada hasta el puesto de la empresa de socorrismo para recibir asistencia sanitaria. Allí el especialista consideró trasladarla hasta el hospital puesto que presentaba varias contusiones en cuello y brazos. Finalmente quedó en un susto y resultó ser un esguince cervical.
No obstante desde la empresa que gestiona el parque acuático, ‘Enjoy Beach Senur’, inciden en los constantes avisos que dieron a la menor para que abandonase la zona donde permanecía esperando y que, previamente ya se le había avisado que estaba prohibido esperar ahí. “Se les dan varias directrices antes de que se adentren en el agua, entre ellas, que está prohibido lanzarse de cabeza, que cuando alguien escala la pirámide deben esperar su turno hasta que la persona que lo hace llegue hasta arriba y que, además, deben esperar el aviso del monitor para emprender la escalada. También se les implora a esperar en un lugar alejado de la persona que se encuentra subiendo”, explica el socorrista que atendió a la menor. A pesar de ello, la niña permaneció justo debajo de la que se encontraba realizando el ascenso. “Antes de que ocurriera le pité y advertí en muy reiteradas ocasiones y fue justo en ese instante cuando la otra niña que estaba subiendo resbaló y le cayó justo encima”, aclara.
Desde la empresa manifiestan que no constituye una atracción de riesgo pero como todo “puede tener sus peligros” si no se respetan las normas de seguridad que previamente se instan. A todos los participantes se les aprovisiona con un chaleco y, además, se aconseja que los menores de entre 7 y 10 años vayan acompañados de un adulto.
Desobedecer las advertencias El incidente de ayer no ha sido el único que se produce en los últimos días a causa de desobedecer las advertencias de socorristas. El pasado sábado un menor tuvo que ser trasladado al hospital desde la playa del Tarajal después de lanzarse desde la roca grande y sufrir varias contusiones. El incidente se produjo a pesar de que el socorrista de Marsave había reclamado varias veces al menor de que está prohibido lanzarse al agua desde esa zona. La empresa de socorrismo expone que esta acción es bastante usual en la playa del Tarajal y apelan a la ciudadanía a evadir esta serie de comportamientos que pueden desembocar en una “desgracia”.