La Ciudad ha achacado a las entidades financieras y a la absorción llevada a cabo hace varios años los errores de la facturación de agua que ha afectado a algunos ciudadanos a los que se les ha cobrado simultáneamente varias facturas. Sin echar balones fuera, no obstante, la presidenta del Consejo de Administración, Yolanda Bel, acompañada por el gerente de Acemsa, Emilio Carreira, y su homólogo de Servicios Tributarios, Enrique Gallegos, compareció ayer para aclarar los errores de un “problema que no negamos que exista, pero que se ha detectado rápidamente y con la misma celeridad vamos a dar las máximas facilidades para que los afectados no soporten las cargas de un error que es imputable a la administración”, explica.
Al parecer, un problema informático derivado de esta absorción financiera provocaba un cruce de datos por el que muchos de los recibos eran devueltos. El caso era patente en las entidades BBVA, BCSH Y Caja Madrid, y comenzó a solventarse hace dos años, según apuntaba Reyes. “Este tema lleva arrastrándose desde 2009, pero ya se había solucionado en un 70% y quedaba el 30% por solventar", explica Reyes. Un porcentaje que en números se traduce en 158 usuarios, y que "ha aflorado ahora coincidiendo con una campaña de impagados” que está llevando a cabo la entidad municipal de Acemsa. “Al actualizar la base de datos detectamos estos errores, y desde entonces hemos pedido la colaboración ciudadana para actualizar la facturación”.
Reyes insiste en que el error imputable a Acemsa sólo afecta a un 4% de los usuarios, mientras que el 96% restante se debe a otro tipo de motivos no relacionados con este problema, sino con otros motivos, y para lo cual se ha llevado a cabo una campaña desarrollada en tres días para atender a 4.000 ciudadanos. Los 158 afectados “han sido atendidos de manera personalizada y ofreciéndoles las facilidades de pago que se ajusten a sus necesidades”, recalca Reyes, añadiendo que “ya han sido solventados tanto los impagados en un porcentaje altísimo, como los afectos por el error en su totalidad”.
Esto choca con las manifestaciones vertidas por UDCE en torno a esta cuestión y que Bel ha tildado de “tergiversación de datos por parte de la diputada Fatima Hamed, ya que no se ha ajustado a la verdad en lo tocante a la cifra de afectados”.
La recaudación media asciende a una factura de entre 80 y 90 euros, según apuntaba el gerente de Acemsa, que insistía en las “facilidades” que la entidad municipal ha otorgado a los usuarios “para poner al día en función de sus posibilidades económicas”.
Por otra parte, Carreira ha explicado que el primer aviso a cada uno de los afectados no implica el corte del suministro de agua, “sino la forma de informarles de que hay un error y que hay que corregirlo”. En caso de que no exista “intención de pagar”, se remitiría un segundo y hasta un tercer comunicado, “porque tenemos que ser conscientes de que el agua es cara y debemos hacer entender que es la mejor manera de administrar este recurso”.
Para el actual gerente de Acemsa, “alguien ha intentado mezclar un error que afecta a un número reducido de personas con el legítimo deber de la administración de cobrar una tasa”. Este error, añade, sí es “imputable” a la administración, que de inmediato “ha sido muy diligente en corregirlo. En dos días y con un esfuerzo de once personas que han puesto a disposición de los usuarios para corregirlo inmediatamente”.
Al margen de este asunto, Carreira ha defendido el “cumplimiento” de la Autoridad Portuaria en el mantenimiento al día de sus pagos. “Cumple con regularidad sus obligaciones, hay una excelente colaboración con Acemsa para evitar problemas de pérdidas en la red, algo que se arregló hace unos días tras detectarse”.