La sociedad de Bayona

Gala de los Goya sin grandes sorpresas (más bien ninguna). Jota Bayona fue el gran triunfador de la noche con 12 Goyas, una película que vi el viernes noche con mi pareja, ya sé un poco tarde (mis disculpas Jota) pero no quería ver la gala sin haber visto la máxima favorita al evento y la película me pareció, francamente, para amantes del cine en toda su extensión: cuidada escena me atrevería a decir al milímetro, todo muy bien calculado para hacer en conjunto un largometraje sublime.

No era un reto fácil pues debía compararse (las comparaciones son odiosas, lo sé) con otra gran película: ¡Viven!, la película de Frank Marshall(1993) y protagonizada entre otros por Ethan Hawke (un actor en mayúsculas) pero bueno, volvamos a la cinta de Bayona, que por cierto se vio que disfrutó muchísimo la velada (no es para menos); se le vio reír, emocionarse y en muchos momentos llorar pero llorar de alegría, una alegría inmensa que nos hizo disfrutar a todos con él.

En cada trabajo, Bayona se ve que crece a pasos agigantados como director desde su magnífica opera prima El orfanato (2007) pasando por Lo Imposible (2012), posiblemente su mejor película, Un monstruo viene a verme (2016), con Sigourney Weaver otra de las protagonistas de la noche y una de la saga de Jurassic (Jurassic World -2018-, cine comercial habrá que contentar a Hollywood.

Su bagaje como director es considerable y aún es relativamente joven 48 años así que le auguro años de grandes éxitos.

Decía antes de comenzar la gala en una de las múltiples entrevistas que a las 6 de la mañana partía hacía Madrid pues a las 9 cogía un vuelo a Estados Unidos a hacer las americas cómo se dice en éste a caso a patrocinar su película para los Oscars, ya saben está nominada cómo mejor película de internacional, mucha suerte Jota Bayona y ojalá traigas el Orcar para España.

El resto de la gala fue entretenida a pesar de las 3 horas y media que duró (hagánselo mirar, miembros de la academia). Ana Belén y Los “Javis” hicieron una gala atractiva al espectador con números de bailes, gran homenaje a la gran Concha Velasco (en su tierra, Valladolid) con un popurrí de sus dos grandes canciones “Quiero ser artista” y la “Chica ye-ye”, nos embargaron de emoción y tristeza al mismo tiempo como el homenaje a la película de Almodóvar(tengo que reconocer que no soy yo del universo Almodovariano), 25 años del estreno de Todo sobre mi madre; la escena del sofá, muy divertida: Pedro Almodovar, Penelope Cruz, Antonia San Juan, Marisa Paredes y Cecilia Roth, la gran ,diría yo, otra de esas actrices en mayúsculas y los ‘Javis’ , sus comentarios de dos rombos (los de cierta edad recordarán los dos rombos en las películas) yo, permítanme, no reproduciré lo que dijeron aunque hicieron disfrutar de una gala amena e interesante.

Otros galardonados, porque no todo fue La sociedad de la nieve, pero casi, David Verdaguer como mejor actor por Saben aquel, el biopic del humorista Eugenio; Malena Alterio mejor actriz por Que nadie duerma, demostrando que es más que la actriz de la que La que se avecina o Aqui no hay quién viva; el incombustible José Coronado, Goya como actor de reparto por Cerrar los ojos, la vuelta al cine de Víctor Erice, entre otros premios.

El momento emotivo de la noche fue el homenaje a los fallecidos en el año 2023; la interpretación magistral de Salvador Sobral (ganador de eurovision en 2017) con la canción Procuro olvidarte hizo soltar a más de uno las lágrimas yo me incluyo pues sufrí una gran pérdida este pasado año y me recordó todo aquello.

Por último y no por ello menos importante dos grandes actores: la Teniente Ripley Sigourney Weaver, premio Goya internacional; y José Sacristán. La primera que más se puede decir de ella actriz de gran talento películas cómo Alien el octavo pasajero, Armas de mujer o Gorilas en la niebla lo refrendan. Mostró en su discurso al recibir el premio gran cercanía y emoción incluso se soltó en castellano con guiño incluido a Bayona y Don José Sacristán, el último de Filipinas - perdón por el símil histórico me viene de formación profesional- de los últimos de su generación, si no el último, de los Landa, López Vázquez, Fernán Gómez o Tony Leblanc entre otros. Los grandes actores de nuestro cine, donde esté Landa o López Vázquez que se quite De Niro o Pacino, perdón por lo exagerado soy sevillano tenemos fama de serlo; incombustible a sus 86 años, su discurso sobre el ganador del Goya de honor Juan Marine fue excelso: más de 10 minutos y sin papel -todo de memoria- me hace sentir más admiración aún más si cabe por él; un actor cómo la copa de un pino y siempre reivindicativo, sin pelos en la lengua que ha marcado a varias generaciones y seguirá marcando porque ya saben, los actores y actrices son inmortales su obra permanece para siempre.

El año próximo la Gala de los Goya será en Granada, en mi tierra andaluza, algo que está haciendo muy bien Juanma Moreno (presidente de la Junta de Andalucía) perdón por hablar de política, esto es cine pero al César lo que es del César, los Goya están muy viajeros quizás pronto sea en Ceuta.

¡LARGA VIDA AL CINE ESPAÑOL!