Hay leyes en nuestro código penal que castigan el maltrato animal. Algo hemos avanzado en este asunto, pero más bien valen de poco. Las penas son blandas y escasas para el daño que hacen, la mayoría de las veces los maltratadotes salen impunes o con unas condenas irrisorias.
Las leyes son tan blandas que poco o nada puedes hacer si ves al imbécil de tu vecino darle una patada a su perro. El juez más o menos te puede llegar a decir lo siguiente: “Que no le ha dejado marcas en el cuerpo”. “Que si era una forma más de corregirlo”. “Que la patada no se la ha dado muy fuerte y que no llevaba malas intenciones”, etcétera. Vamos, que solo falta que te diga lo que otros vecinos te pueden decir: “el perro es suyo”.
Son pocas las personas que están dispuestas a denunciar que su vecino maltrata a su perro, y cuando aparece un/a valiente, para esto las mujeres son más atrevidas, los primeros inconvenientes vienen de parte de las autoridades y asociaciones, las cuales tienden a desanimarte y decirte que no te metas en líos. Así las cosas, si ves a alguien dándole una patada a su perro, lo que te queda es tomarte la justicia por tu mano y devolverle tú a él la patada. En ese caso, será él quien te denuncie a ti, y serás tú quien terminará pagando una multa, con la correspondiente indemnización, si le has causado daños.
Casi nunca está justificada la violencia, pero en este caso estaría justificada para que el individuo sepa que una patada duele.
Es triste, pero es así, en España no se denuncia ni el 10 % de los casos de maltrato animal.
La gente no está concienciada de que los animales también tienen derechos, es más, aún queda gente que ni si quiera sabe que los tienen. Pero a pesar de todo, si ves a alguien de maltratar a un animal, no dudes en denunciarlo.