La discriminación de la mujer respecto al hombre no existe en nuestra ciudad en lo que a contratación se refiere. Así lo indican los datos del Informe del Mercado de Trabajo Estatal 2015, un estudio elaborado por el Observatorio de las Ocupaciones del Servicio Público de Empleo (SEPE).
Las cifras indican que el año pasado hubo un total de 8.364 contratos a mujeres y 8.331 firmados por hombres. Las primeras representan el 50,10% del total. El dato es en sí positivo, aunque es necesario evaluarlo con la ‘calidad’ de los contratos, es decir, con su duración y con la cuantía de los salarios en función del horario.
Sin embargo, el hecho de que la contratación femenina supere a la masculina es un hecho esperanzador en el objetivo de equiparar los porcentajes de desempleo entre ambos sexos. Hay que recordar que, según los datos del año pasado, 2014 finalizó con 7.237 mujeres desempleadas frente a 5.358 hombres. El desequilibro es aún más grande si tenemos en cuenta que en Ceuta es mayor el número de varones censados, una circunstancia que sólo se da también en Castilla-La Mancha y en la Región de Murcia.
El dato anima al optimismo si se analiza la evolución de los porcentajes, pero los más de 12.000 desempleados registrados en nuestra ciudad no permiten lanzar las campanas al vuelo. Aunque los desequilibrios entre hombres y mujeres se vayan corrigiendo, muy ligeramente, lo cierto es que el alto número de parados continuará siendo un quebradero de cabeza en los próximos años.
También destaca en el informe la alta dependencia del sector Servicios para ocupar a la mano de obra. De hecho, más del 80% de los contratos los ofertan empresas de este sector, el resto, salvo en la Construcción, el número de ocupaciones es casi testimonial.
Son cifras que, analizadas en su conjunto, confirman la necesidad de diseñar un plan de desarrollo económico a medio y largo plazo para ir paulatinamente independizándonos de los planes de empleo, una solución ‘ficticia’ para un grave problema crónico de nuestra ciudad.