La desesperación acude de forma incesante a esta familia. Buscan a su hermano, Muhammad Saeed Shaqur, que falta de casa desde hace casi 8 años, cuando desapareció de su casa, en Río Martil. Contaba solo con 25 años y, según indica su hermana, Oumaima, trabajaba en el sector de la mecánica y los repuestos de automóviles en su ciudad. Creen que Ceuta es una ciudad en la que ha podido estar aunque, como el caso de tantos, no era un objetivo asentarse en ella, sino un medio para llegar a otro lugar.
“Desde finales de 2016 ni siquiera hemos escuchado su voz”, afirma con amargura Oumaima. Después de tanto tiempo, toda la familia -formada por cinco hermanos contando con Muhammad-, acusa un cansancio físico y psicológico que se acrecienta con el paso, no ya de las semanas, sino de los años.
Su madre está muy afectada por su ausencia, cada día más. “Ha empeorado desde su desaparición. Necesita saber de él, si está bien o no”, manifiesta su hermana, cansada de esperar en un hogar roto por la ausencia de su hermano durante tanto tiempo y, sobre todo, por la incertidumbre de no saber nada de él.
Muhammad se fue sin avisar, sin decir nada, sin volver a comunicarse con ellos en esta incierta huida que desconocen a dónde lo ha llevado. “Todos estamos muy cansados en casa, porque se fue sin decir nada y enfermo,ya que sufre de ataques de asma. El cansancio no es solo físico, es también psicológico”, señala Oumaima Chakour, que sospecha que en el momento de su partida alguien le prometió el sueño que tenía, sin tener en consideración que dejaba a una familia preocupada por que se fuera así, de este modo, y no volver a saber de él desde su partida. “Alguien le diría en ese momento que se lo llevaría a trabajar con contrato en un ciudad española”, sospecha su hermana.
Oumaima cree que esa ciudad se localiza en el norte de España y linda con Francia, pero lo desconoce. “Cuando se fue no dijo a dónde iba. Se fue de repente, sin regresar ni contactar con nosotros en ningún momento en todo este tiempo”, asegura.
La última información que tienen no está verificada y es de 2022, cuando un vecino y amigo de Río Martil que reside en España regresó de vacaciones. “Nos aseguró que lo había visto en España, y que vivía allí, aunque no precisó lugar exacto. Le dimos nuestro teléfono de contacto con la esperanza de que lo volviera a ver y se lo diera. Sin embargo seguimos igual. Mi hermano no llamó y a esta persona tampoco la volvimos a ver”, asegura.
La familia facilita una foto suya para ayudar su localización, aunque es de cuando Muhammad contaba con 25 años y ahora tendría 32. Nacido el Martil el 3 de marzo de 1991, su familia necesita saber qué ha sido de él, dónde está, si está bien... Muchas preguntas para un doloroso vacío de respuestas.