Los empresarios comienzan a comprar los terrenos comerciales de Loma Colmenar y que desde hace un tiempo viene vendiendo la empresa pública SEPES que es la que en su día realizó toda la urbanización de la zona.
Son los terrenos que se encuentran en la carretera de circunvalación que va desde el cruce de la Almadraba hasta la rotonda del Puente del Quemadero. Toda la vaguada que está detrás de los pisos de la Reina y de la actual prisión de los Rosales.
Según ha podido conocer esta redacción hay una empresa ceutí que está realizando la compra de una gran parte de las parcelas en venta, pero también hay otros interesados que igualmente están escriturando. El objetivo final será la construcción de un gran parque comercial para lo que se contaría también con los terrenos de la actual prisión de Los Rosales cuando se abra la nueva macroprisión de Fuente Mendizábal.
En un principio esos terrenos que urbanizó SEPES la intención era que sirviera para la instalación de empresas que tuvieran como objetivo una línea industrial de pequeña transformación, pero lo cierto es que los tiempos han ido cambiando y todo apunta que el parque comercial será la solución definitiva.
Hace un año y medio aproximadamente ya publicamos la confirmación que hizo el propio delegado del Gobierno sobre el interés que existía por aprovechar los terrenos de la actual prisión para formar parte de ese centro comercial. Lo que se desconoce, desde luego, sería la fórmula que se utilizaría para la transmisión de estos terrenos que son propiedad de la Administración General del Estado a una empresa privada, aunque, por supuesto, la compra es el más probable.
Un parque comercial que no se limitaría únicamente a la construcción de una gran superficie y dentro del mismo edificio distintas tiendas que sirve de apoyo a las compras en una marca de supermercados. Por lo visto, la intención es que fuera de ese propio edificio también se levantaran otros inversionistas de distintas ramas comerciales.
Por supuesto, que la construcción de un parque comercial en los terrenos de la actual prisión de Los Rosales tendría un efecto de destino hacia el consumidor de nuestra ciudad, pero también un nuevo atractivo para los potenciales clientes que llegarían desde el otro lado de la frontera, lo que supondría un nuevo atractivo para que sea mayor cada vez el destino de Ceuta como ciudad de compras y de servicios para estas personas.