La tradición de visitar los sagrarios durante la Semana Santa, que la Hermandad del Valle se viene proponiendo recuperar desde hace varios años, ha tenido su respuesta en un grupo de mujeres que hoy, ataviadas con el tradicional traje de mantilla, acudieron a la parroquia del Valle para iniciar un recorrido por las iglesias del centro de la ciudad.
Tras la celebración de la misa en la parroquia del Valle, las mujeres iniciaron su recorrido, comenzando precisamente en esta iglesia y continuando en dirección hacia Los Remedios, otra de las paradas obligatorias del Jueves Santo, junto a San Francisco, Santa Iglesia Catedral y Santuario de Nuestra Señora de África, hasta regresar nuevamente al Valle.
Este es el cuarto año consecutivo en que se organiza este evento y ocho mujeres participaron de esta tradición que ha ido tomando auge cada año. “Hay muchos puntos de España en que se empieza a recuperar y aquí en Ceuta hemos podido ver que el número de mujeres se ha incrementado. El año pasado solo fuimos cuatro y este hemos subido hasta ocho”, comenta la hermana mayor de la Cofradía del Valle, Isabel Gutiérrez.
Ataviadas de riguroso luto, tal y como manda el protocolo de mantilla, estas ocho ceutíes iniciaron la visita a los sagrarios en la propia parroquia del Valle. Para algunas es su segundo año y lamentan la pérdida de esta tradición. “Se han perdido los valores, al igual que se está perdiendo todo”.
Otras viven esta experiencia religiosa cada Semana Santa. “Para mí es importante visitar al Señor en estos días y es muy emocionante para una persona que lo viva desde la fe”.
El grupo recorrió las iglesias y parroquias del centro ataviadas de riguroso luto
Hay quien no ha faltado ni un solo año a la convocatoria del Valle. “Es una experiencia que engancha. Siempre esperas impaciente al Jueves Santo y ya el miércoles empezamos con los preparativos de la ropa. Creo que es algo que hay que vivir una vez en la vida y quien lo hace, repite”.
Una experiencia a la que Gutiérrez confía que se sumen otras mujeres en próximos años, “porque hay que acompañar al Señor en estos días y visitarlo para pedirle perdón y darle las gracias”.
Cuando yo era teniente iba con mis soldados, con tachuelas en las botas, a recorrer los sagrarios de Ceuta.
¡¡¡Enhorabuena para esas ocho SEÑORAS!!!
Cuando yo era teniente iba con mis soldados, con botas con tachuelas a recorrer los sagrarios de Ceuta.
¡¡¡¡Enhorabuena para esas ocho SEÑORAS!!!