La Formación Profesional Dual contará el próximo curso con la incorporación de nuevos ciclos. La propuesta es “amplia y firme”, apuntan desde la Dirección Provincial de Educación, y se concreta en un total de seis, de tres centros educativos. La sede del Ministerio prefiere ser cauta y no concreta la cifra exacta de ciclos que se adherirán al programa en el período 2019-2020, “aunque de todos esperamos que empiecen a funcionar algunos”. No obstante, en un período de dos años los estudios de FP Dual se habrán triplicado en Ceuta. Esta ha sido una de las principales apuestas del equipo que dirige Javier Martínez, que desde su aterrizaje posicionó la Formación Profesional como un pilar clave en la oferta formativa de la ciudad y, dentro de ella, a la Dual, que ha arrancado este curso con el ciclo formativo en actividades comerciales del instituto Puertas del Campo.
De los seis ciclos interesados, cuatro de ellos se encuentran elaborando sus Planes de Estudio, como son el grado superior en Educación Infantil, del instituto Abyla; el superior en Instalación y Mantenimiento, del ‘Siete Colinas’; el grado medio en Farmacia, del instituto Almina; y el superior de Laboratorio, también del ‘Almina’. Por su parte, el grado medio en Cocina y el superior en Automoción, los dos del instituto de Villajovita, someten a estudio su viabilidad incorporarse a esta modalidad de enseñanza basada en la formación compartida entre el centro educativo y las empresas.
En la actualidad son tres los estudiantes que ya se forman con este programa pionero en la ciudad, aunque bien extendido por el resto del país. Desde el 8 de enero los tres seleccionados alternan su formación semanal entre su centro educativo, el instituto Puertas del Campo, y la empresa con a que se firmó el convenio de colaboración, Carrefour. Este primer curso los alumnos recibieron una base teórica durante el primer trimestre. Período en el que se imparten los conocimientos necesarios para poder llevarlos después a la práctica, así como una formación complementaria en prevención de riesgos laborales. Tras pasar el período de formación se incorporaron a la empresa donde realizan practicas tutorizadas dos días semanales, mientras que los tres restantes acuden al instituto.
El programa varía en el segundo curso, y desde el primer trimestre acudirán a la empresa tres días a la semana y dos al centro educativo. Esta es la estructura base de la Dual que, no obstante, “podrá sufrir variaciones en función de cada ciclo”, ya que cada uno debe adaptar los contenidos del módulo a la empresa.
Las plazas ofertadas en cada estudio dependerán de la empresa y la disponibilidad de cada una de ofrecer un tutor por cada alumno contratado. Este tutor realizará una evaluación cuya nota hará media junto con la obtenida en el centro.
La FP Dual se asienta en una formación compartida entre el centro y la empresa, situando al alumno en un entorno laboral desde el primer día, lo que le permite adquirir los conocimientos en el mismo lugar en el que deberá aplicarlos. Se trata, de un aula de simulación o aula-empresa que se presenta “como un gran atractivo tanto para empresas, que obtienen mano de obra, como para los alumnos, que tiene la oportunidad de acceder a una bolsa de trabajo”. Además, señalan desde la Dirección Provincial, que existe un elevado porcentaje de estudiantes que, una vez finalizada su formación, han conseguido optar a un puesto laboral.
La Formación Profesional se verá reforzada con nuevos ciclos en el curso 2019-2020. Un catálogo que presentó hace unas semanas en Madrid el director Provincial ante el Ministerio de Educación. Sin una respuesta definitiva todavía, la apuesta del equipo de Martínez se centra en un refuerzo de las actuales enseñanzas. “Lo fundamental es que estén cubiertos todos los niveles”, es decir, completar los actuales itinerarios antes de ampliar las familias.
Este es uno de los objetivos y deberes que se marcó Educación al inicio del presente curso y que obedece a la elevada demanda que presentan estos estudios. Según los datos que maneja la sede del Ministerio, este año, nuevamente, la demanda ha vuelto a superar todas las previsiones, dejando a varias decenas de aspirantes en lista de espera. Las buenas perspectivas laborales que ofrece esta educación, su duración de dos años, los niveles de cualificación y la posibilidad de hacer prácticas en empresas animan a muchos jóvenes a optar por estudiar un ciclo formativo y que, en los últimos cursos, ha situado la ratio de demanda entre las más elevadas.
En este curso 2018-2019, un total de 2.527 alumnos cursan estudios de Formación Profesional en Ceuta. De ellos 504 pertenecen a la básica, 1.264 a primer curso y 761, a segundo. Cifras que se mantienen con respecto al año anterior con un “pequeño” repunte.
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