Seguna madrugada consecutiva en la que los integrantes se ven en "emboscadas", como uno de ellos ha definido, y lanzamientos de piedras que les impiden realizar sus labores de extinción de incendios sin riesgo para su salud.
Si bien en la noche del lunes al martes
los apedreamientos se desarrollaron en un vertedero ilegal del Príncipe, las antiguas caracolas, todo un punto negro para el SEIS, apenas 24 horas más tarde ha ocurrido lo mismo en la rotonda del colegio Reina Sofía. El Cuerpo acudió al lugar y solicitó la ayuda de la Policía Nacional, que tuvo que acudir rápidamente para asegurar la zona y que los bomberos pudieran extinguir el fuego. Aunque en un primer momento eran sólo unos rastrojos, las llamas podrían haberse extendido por todo el monte.
El vertedero ilegal del Príncipe, misión imposible
Pero estos lanzamientos de piedras sufridos junto al 'Reina Sofía' no han sido la única "emboscada" llevada a cabo en esta madrugada. Horas antes, en torno a las 2 de la madrugada, recibieron una llamada alertando de un nuevo incendio en el mismo lugar en el que 24 horas antes habían sido apedreados. De nuevo chatarra acumulada. El servicio decidió, tras valorarlo junto a los cuerpos policiales, no subir al Príncipe ante una nueva amenaza de encerrona cuando el fuego "no tenía peligro ninguno".
Las llamas sobre los rastrojos cercanos al 'Reina Sofía', aseguran desde Bomberos, podrían haberse extinguido en 5 minutos. Pero la necesidad de llamar a la Policía alargó la su trabajo a más de una hora. En esta ocasión no se planteó la posibilidad de evitar la intervención, como sí se hizo en las antiguas caracolas, ya que la cercanía del monte podría haber provocado que el incendio se extendiera.
Este lugar fue una zona de continuos apedreamientos "antiguamente", aunque últimamente no se habían producido durante las intervenciones del SEIS.